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Festival asturiano en la Subida Ubrique, con dominio total de Fombona en el Campeonato de España y doble victoria también para Oscar Palacio en la Copa CM. Los dos triunfos del gijonés le reafirman como el máximo favorito al título tras sumar ya tres primeros puestos en las cuatro fases disputadas, mientras que para Oscar llegó por fin el retorno a lo más alto del podio del nacional, lugar del que estaba ausente desde el 2004.
CRONICA

El viaje a Ubrique es de esos en los que tengo siempre sensaciones un poco contrapuestas antes de ponerme en marcha. Por un lado está la 'pereza' que da el meterse 'entre pecho y espalda' cerca de 1000 kilómetros para llegar al coqueto pueblo andaluz 'semiescondido' en plena serranía de Ronda. Pereza a la que se unía otra vez la 'mala pata' de que, por segundo año consecutivo, las fechas de la carrera coincidían con mi cumpleaños (¡de nuevo me quedo sin soplar las velas!). Por otra parte siempre estan las ganas de volver a ver en directo una carrera de esas en las que hay auténtico ambiente durante todo el fin de semana, con la localidad que la acoge totálmente volcada en el que es el acontecimiento deportivo del año para la zona.
Personalmente, además, la de Ubrique es una de las subidas en las que trabajo más a gusto. Primero gracias a la peculiaridad de que su primer kilómetro esté justo en el mismo núcleo urbano, con las asistencias de los equipos situadas al lado de las primeras curvas, lo que permite moverse con rapidez 'entre pista y boxes', algo que cada vez me es más necesario debido al mayor número de frentes que tengo que atender en cada carrera. Y, después, debido a que, desde hace tres años, monto mi 'oficina móvil' en el 'Enrique Calvillo', un hotelito rural situado en la cercana población de El Bosque, que me descubrió casi de casualidad Geli, de Viajes Antuya, en el 2006 y que, desde entonces, es mi 'campanento base' ideal: conexión wifi de alta velocidad en la muy amplia y confortable habitación, restaurante en el mismo hotel con comida casera, sin concesiones a la 'nouvelle couisine' pero sabrosa (¡el plato de 'huevos a lo bestia' es ya un clásico en mi dieta ubriqueña cada año!) ... y el mejor precio de toda la temporada ¡sólo 30 euros noche!

Así que
el viernes tempranito me ponía c amino de 'El Bosque' decidiendo esta vez hacer el largo camino por la algo más corta en kilometraje 'Ruta de la Plata', que cuenta cada vez con más tramos de autovía lo que la empiezan a hacer más 'rápida' que el habitual recorrido de otros años, atravesando Madrid y pasando 'Despeñaperros'. Aun conduciendo todo el reto a velocidades totalmente legales (¡está la cosa cada vez peor para 'pisarle' un poco en las autovías que no sean de peaje!), me plantaba en Sevilla en poco más de siete horas, cruzaba sin problemas la capital hispalense y apenas una hora después ya estaba instalado en mi hotel, curiósamente además en la misma habitación que hace dos años, la número 12.

Lo que quedaba de viernes era de relax, apenas si hacía un par de tareas pendientes que llevaba preparadas en el portatil, cenaba temprano tras charlar un rato con el patrón de Alteauto, Lavios, que también se alojaba en el mismo hotel, y que me comentaba su intención de seguir este año todo el nacional con ese Peugeot 206S1600 que conozco bien por haber sido el de 'el primer cliente de GJD', el ya más amigo que cliente Juan Carlos Fernández.

CAMPEONATO DE ESPAÑA

Fombona ya lleva tres de cuatro este año...

...y Borreguero ya suma tres segundos puestos

Flores perdió el liderato en Ubrique

Fase A

El sábado por la mañana no había prisa, así que me permitía el lujazo de dormir hasta basante más tarde de lo habitual en un fin de semana de carreras, y de desayunar tranquilamente acompañando el 'cafelito' con una típica tostada andaluza, de esas de rebanada de pan bien grande con aceite y sal. A eso de las 12 salía en dirección a Ubrique, donde el ambiente ya se dejaba notar, mucha gente por todas partes, y el habitual problema para aparcar que, esta vez, parecía resolver con rapidez y eficacia, dejando el coche al lado de la plaza de toros y ya en plena zona de asistencia. Y digo 'parecía', porque al acabar el día comprobaría que no había sido tan buena idea dejar ahí el coche ... ¡ya que justo en esa explanada decidían montar el parque cerrado dejándome 'encerrado' por más de una hora!

El habitual repaso al improvisado parque de trabajo en que se convierten, por tres días, las calles que van de la estatua de Jesulín a la carretera de acceso a Ubrique me servía para recopilar las novedades de las que os hablo con algo más de detalle en la sección de noticias, y para ir ya charlando con unos y otros y empezar a cogerle el pulso a la carrera ... ¡y casi diría que a la temporada! Y es que, en Moratalla, entre que me 'perdí' el sábado por la coincidencia con el Villajoyosa y que la prueba contó con una inscripción bastante floja y se desarrolló en un ambiente, en general, frío, la sensación que tenía este sábado a mediodía era, casi, de que, realmente, la temporada empezaba en Ubrique y que lo de Moratalla había sido algo así como unos tests de pretemporada.

Tras sacar unas fotos en el briefing, que este año tenía lugar en la entrada de toriles del coso taurino, cogía el 'bus de prensa' que me dejaba ya al primer 'punto de observación' del fin de semana, el popular 'cruce de la gasolinera'. Situado a apenas un kilómetro de la salida, ahí termina la vertiginosa (y ancha) parte inicial de la subida para dar paso a la más estrecha y virada que discurre por la carretera que va a Benaocaz. Un sitio perfecto para sacar fotos variadas desde distintos ángulos ... y para ver como unos y otros empiezan ya a apurar la frenada en uno de esos sitios en los que no vas a ganar la subida pero donde si puedes perderla si te equivocas. De todas formas, en los libres nadie se la jugaba más allá de lo necesario, aunque ya me llamaba la atención lo rapidísimo que llegaba y pasaba Fombona, aprovechando todo el ancho de la calzada y saliendo ya 'cruzadito' y por el exterior, entre los aplausos de un público que lo aprecía una barbaridad, como tendríamos ocasión de comprobar en multitud de ocasiones a lo largo del fin de semana.

Un rápido paseo 'cuesta abajo' nos llevaba de vuelta a la salida, donde recuperábamos ese lujo que supone tener a al gente de Fotomotor encargándose de los tiempos en directo. Gil ya tenía impresas todas las clasificaciones en sus preceptivas hojas de diferente color para cada categoría, y un rápido vistazo nos permitía ver como había alguien que había subido más rápido que Fombona, aunque en el cruce no nos lo hubiese parecido: se trataba de Borreguero, ya muy fuerte todo el fin de semana de Moratalla y que en Ubrique iba a confirmar que aquello no fue 'flor de un día'.

Los entrenos oficiales, que veíamos desde otro de los sitios 'típicos' de Ubrique, el exterior de la segunda curva, con su vista de las casas blancas del pueblo como inconfundible fondo para las fotos, confirmaban el buen momento de 'El Panete', de nuevo el más rápido, y añadían un nuevo aspirante a la lista de posibles ganadores, el de Aznar. Tras los problemas sufridos en Moratalla, el almeriense se presentaba en Ubrique con su antigua unidad del A4 pero con la mecánica del nuevo, y nos comentaba que su objetivo era, sobre todo, reencontrarse con el coche y tratar de estar, al menos, en sus tiempos y no lejos de ellos como le había ocurrido en la prueba murciana. José Antonio era segundo en la tanda de ensayos, apenas un par de décimas por delante de su 'tocayo' Fombona y tras ellos ya se abría un auténtico abismo de más de tres segundos, el que separaba a los tres Audis del 206WRC de Flores. Destacaba la ausencia en las primeras plazas del otro A4 en liza, el de Jesús Fernández, que registraba un inusualmente alto crono de 2:44, a 18 segundos de la cabeza. Evidentemente algo había pasado, y la explicación nos la daba Juan Carlos Cueva que acababa ya de hablar con 'Tano' por teléfono: 'se pasó de frenada en la gasolinera'. Nada grave por tanto, así que habría que contar también con el rapidísimo 'Chus' para la subida oficial.

Tocaba hacer otro completo repaso a los diferentes equipos y así ir ya conociendo de primera mano como les había ido a unos y otros. Fombona se mostraba muy tranquilo y, a la pregunta de si el retorno del uso de los calentadores iba a ser muy importante en la resbaladiza zona inicial, nos comentaba que su influencia iba a ser, sobre todo, de confianza a la hora de acelerar a fondo en la salida y las dos primeras curvas, ya que luego en la larga recta hasta el cruce poco o nada iban a significar. De todas formas, aunque fuese por ese 'plus' de confianza, todos los 'de arriba' los montaban ya, como teníamos ocasión de comprobar mientras seguíamos calle abajo. En la siguiente esquina, Aznar charlaba animadamente con Angel Castro y, al lado, JJ Fernández nos comentaba que andaba más que justito de ruedas y que no las tenía todas consigo ante la 'expedición extremeña' de los Noriego y Jiménez, debatiéndose entre lo que indicaba la cabeza (asegurar los puntos ante unos rivales que no seguirán el campeonato) y lo que pedía el corazón ('tirarse' a ganar).

A mitad de la calle estaba la asistencia de Riera Racing, en donde había trabajo para cambiar un palier roto en el coche de Pericet. Por allí andaba Cruz, comentando con Xavi como se había encontrado en su retorno al volante del BMW supeturismo: 'todavía adaptándome' era su rápido resumen cuando le preguntábamos al respecto.

El rato pasaba volando y ya estaba con el tiempo justo para ver la salida de la subida decisiva, desde unos metros más allá del kilómetro cero de la prueba. La arrancada, en ligera pendiente y sin el típico 'taco', que este año no está permitido por el reglamento, dejaba como imágenes más notables la tremenda salida del Megane Trophy de Magdaleno, con el tren trasero barriendo todo el ancho de la calzada de derecha a izquierda durante un buen centenar de metros, las también realmente espectaculares de los BMW, con la propulsión a las ruedas traseras haciendo su trabajo y el chasis y la suspensión tratando de absorver el súbito empujón, y las siempre increiblemente efectivas de los Audi tracción total, con los A4 de Borreguero y Aznar como los que más sensación de poder daban en esos primeros metros, y con el de Fombona que buscaba desde la arrancada la mejor línea para trazar ya a fondo la leve izquierda inicial. Nada más partir Flores con el número 1 en las puertas de su Peugeot, nos acercábamos a la oficina móvil de tiempos y no teníamos que esperar ni un minuto para saber el nombre del ganador: Fombona. El gijonés había pulverizado todos los registros de entrenos, bajando hasta un 2:24 que era simplemente inalcanzable para sus rivales. El que más cerca (¡o menos lejos¡) se quedaba era Aznar, que no bajaba del 27 y cedía casi tres segundos ... una eternidad en montaña. A dos décimas más venía Borreguero (decidamente en plena forma), completando el primer podio 100% Audi del año por delante de Flores, siempre a lo suyo: no fallar, ganar el grupo A y seguir sumando el máximo de puntos posibles. Quinto, y muy descolgado para lo que en él es habitual, era Jesús Fernández, que no encontraba explicación a su crono cinco segundos más lento que el del ganador: 'no se que pasa, no he fallado especialmente en ningún sitio' era su resumen mientras se bajaba cariacontecido del A4.

'Tano' era el último en bajar del 2'30 y había que irse casi al 2'32 para encontrar al sexto clasificado, el BMW de Pérez Gaitán. Tras casi un año de inactividad, el andaluz volvía con fuerza y se situaba como el 'mejor del resto', con otro par de segundos hasta el siguiente, el Porsche de Castro ('con la suspensión de circuitos y el cambio largo se hace lo que se puede' nos comentaba) que, a su vez, precedía en otros dos a los 'behemes' de Cruz (todavía lejos de sacarle todo el partido al 320 en su primera carrera con él tras varios años) y Lirola, segundo en grupo A y contento con el nuevo motor 3 litros ('corre tanto como el otro aunque tenga menos cilindrada, en cuanto le quitemos al coche los kilos de más que tiene ahora se va a notar más'). El 'top ten' lo completaba el ganador del grupo N, el ibicenco Fernández ('no está mal un 36 con este coche ¡hubo que correr para ganarlos!' declaraba orgulloso al ver que había dejado a cerca de dos segundos al primero de los extremeños, el EVO VIII de Noriego.

Y así, en un visto y no visto (desarrollo impecable de las tres mangas, sin un sólo parón de importancia), se terminaba la fase A que nos dejaba con muy buen sabor de boca: ... aunque el relatado 'atasco' del parque cerrado nos acababa por aguar un poco la fiesta, retrasando en hora y pico el inicio del 'trabajo de oficina' que todavía quedaba antes de disfrutar del relax que siempre me supone una buena cena leyendo algo tan interesanrte como el Motorsport dedicado al 40 aniversario de la desaparición de Jim Clark que llevaba en la maleta para la ocasión. Una lectura que amenizaba la larga espera entre entrante (riquísimo foie al Pedro Ximenez) y plato (retorno a la infancia con unas croquetas de merluza casi como las que me hacía mi abuela hace ya tantísimos años) ... y es que no todo puede ser perfecto, y los camareros andaban ya un poco desbordados a eso de las once de la noche del sábado. Pero bueno, no había prisa, para acabar un heladito de postre y a la cama, que el domingo si tocaba madrugar ... ¡lo de dormir la mañana en un día de carreras no se da nunca dos veces seguidas!

Fase B

Como el primer kilómetro de subida coincide con el único acceso al pueblo, el domingo había que entrar en Ubrique antes del cierre de carretera, previsto para las 8 de la mañana. Así que me levantaba temprano y unos minutos antes del corte ya pasaba la zona de salida y estaba buscando parking, econtrándolo al final de la zona de asistencia, en un sitio en que ni molestase ni me molestasen como el día anterior.

De vuelta a la salida recorría por enésima vez en el fin de semana (¡y las que quedaban!) la 'zona de asistencia' en la que, poco a poco, los equipos iban entrando en actividad. El espectacular Hummer de prensa estaba ya preparado para subir así que decidíamos probar lo que se siente subido en un 'aparato' de esos y nos dejábamos llevar hasta la conocida curva del 'pluviómetro', uno de los sitios más concurridos por los aficionados de la zona. Por el camino obervábamos como ya eran muchísimos los aficionados que buscaban sitio en las cunetas, dispuestos a animar a lo pilotos en sus diferentes subidas.
Nada más dejarme el Hummer en el destino elegido, recordaba que la última vez que había estado allí (hace un par de años), también había sido para la primera subida del domingo ... y tuve que cambiarme de sitio porque el sol sale justo enfrente si te pones en el exterior arruinando toda posibilidad de sacar unas fotos medianamente decentes (¡especialmente con mis escasos conocimientos en los 'reglajes' de las reflex!). De todas formas, el interior de la curva tampoco era mal sitio, de hecho era hasta mejor para sacar una imágenes de esas con público de fondo y el coche muy de cerca que suelen quedar bastante espectaculares, especialmente con la buena luz del sur de que se disfrutaba en esta aun muy fría pero ya notáblemente soleada mañana de domingo. Si el sábado el cielo había estado bastante cubierto, con incluso alguna que otra nube negra 'amenazando', el domingo la serranía de Ronda se recortaba sobre un azul intenso. Iba a acabar haciendo hasta calor y, probáblemente, la carretera estaría en condiciones más idóneas en la segunda subida del día (los entrenos oficiales), que en esta primera que iba a empezar ya (los libres), todavía con el piso bastante frío, y que en la última (la de carrera), prevista para las doce y cuarto, cuando ya la temperatura del asfalto habría subido tal vez un poco más de la cuenta.

Los cronos del warm up colocaban ya a Fombona en cabeza con un nada desdeñable 2:26:6, dos segundos peor que su crono ganador de la víspera pero, aun así, todavía mejor que cualquiera de los registrados por sus rivales en la subida oficial de la Fase A. Minutos después, ya de vuelta a la zona de salida, José Antonio nos confirmaba nuestras impresiones respecto al estado del piso y, mientras charlábamos con él, lo notábamos realmente seguro de sus posibilidades y dando la misma sensación de tenerlo todo bajo control que nos había dejado al verlo pasar en perfecta derrapada de las cuatro ruedas por el pluviómetro. Una sensación que se acrecentaba cuando volvía a liderar la tabla de tiempos en la segunda subida del día, con un crono similar al de los libres, aunque esta vez con Borreguero algo más cerca liderando el grupo de perseguidores. Un grupo en el que estaban Flores, Aznar y 'Tano', con este último algo más descolgado, al igual que el día anterior pero, al menos, sabiendo ya la causa: un captador del acelerador estaba haciendo 'de las suyas' y las imperiosas órdenes de pisar a fondo del piloto no se acababan por transmitir del todo al propulsor de su A4, con la consiguiente pérdida una décima aquí y otra allá que acaba por ser insalvable hagas lo que hagas. Así que para el asturiano tocaba resignarse y salvar lo salvable pensando ya en la siguiente carrera.

Tras el quinteto de cabeza se volvía a abrir un importante hueco, con Cruz y el BMW ya como 'mejor del resto' y con la ausencia de Gaitán, que había sufrido la rotura del buje trasero derecho en su 320ST. Tras Cruz aparecía Castañón, por fin en un puesto más acorde con sus posibilidades luego de haber dado con un remedio 'casero' para los problemas de encendido de su Nissan Primera. Pedro no es que estuviese contento con como iba el coche pero, por lo menos, no estaba tan 'depre' como lo habíamos encontrado el sábado cuando el propulsor del superturismo japonés 'tosía' de forma alarmante. Ahora ya podía defenderse con dignidad y empezar, de paso, a hacer algún kilómetro 'de calidad' con un coche que, hasta ahora, le ha dado más disgustos que satisfacciones.

Como siempre me gusta enterarme cuanto antes de como queda la oficial y, además, me faltaban las imágenes de la salida 'desde atrás' con ese 'muro de público' de la recta inicial de Ubrique que tan bien queda para las fotos que luego se envían a los patrocinadores de los diferentes clientes, de la última manga no veía más que la arrancada. Y lo hacía con la casi certidumbre de que 'todo el pescado estaba vendido', lo que en mi pensamiento significaba que Fombona iba a ganar 'fácil'. Algo que al ver su espléndido 2:23:1, segundo y pico mejor que el crono de la víspera pese al piso más caliente y, probáblemente, algo más lento, parecía quedar ya más que confirmado. Y, sin embargo, ¡de 'ganar fácil' nada de nada! El siguiente en pasar por meta era Borreguero, sorprendiendo a todos con una mejora espectacular en sus registros anteriores que le metía también en el 23 y le daba otra segunda plaza, pero esta mucho más cercana de la primera ... ¡a sólo siete décimas! El 'Panete' está llevando a cabo un inicio de temporada sensacional, con tres segundos puestos y un tercero, y a este ritmo no debería de tardar en sumar su primera victoria. Desde luego se la está mereciendo. El último crono que aparecía en la pantalla de tiempos era el de Flores y servía para completar el podio y sumar otro buen puñado de puntos que le dejan en la estela de Fombona en la general provisional, de la que el gijonés ya es líder tras sumar su tercer triunfo del año.

Fuera del podio se quedaba Aznar, lo que no dejaba de ser una sorpresa, conociendo como el almeriense suele ser siempre más rápido los domingos. Uno pensaba que tal vez el coche 'híbrido nuevo-viejo' habría dado algún problema, pero José Antonio no buscaba excusas: 'no he acabado de estar a gusto, frenaba un poquito antes en algunos sitios, aceleraba algo más tarde en otros, no ha sido mi mejor fin de semana' era su sincero resumen de lo ocurrido. De todas formas, para no andar fino, un segundo y un cuarto, acompañados del triunfo en el regional andaluz, no eran mal botín para el entusiasta piloto andaluz ... aunque estaba claro que le sabía a poco.

Quinto, que era lo máximo a lo que podía aspirar dadas las circustancias, terminaba Jesús Fernández, sin ser inquietado por nadie ya que el habitual hueco hasta el sexto era esta vez mayor al haberse vistos perjudicados por las banderas amarillas en la parte final del recorrido los tres BMW de Riera Racing y el Nissan de Castañón, cediendo todos ellos dos o tres segundos más de la cuenta. De este segundo grupo acababa por emerger Cruz, cerrando el fin de semana con una sexta plaza que debe de ser el punto de partida para intentar el asalto a un puesto entre los cinco mejores ya en La Santa, una de las dos pruebas (la otro es Santo Emiliano) en las que los BMW se encuentran más a gusto de todo el calendario del nacional.

Tras Cruz acababa Gaitán y, a continuación, venía ya, Castañón, que hacía sus cuentas al final del día: 'con lo de las banderas amarillas perdí dos o tres segundos ya que tuve casi que parar, otros dos se pueden bajar cuando tenga el coche más por la mano y otro con gomas nuevas ... hasta 26 o 27 se puede llegar ... ¡pero hasta el 23 imposible! Los Audi están en otra galaxia'. Una reflexión que era común a cualquiera con el que comentases el resultado: los cronos de Fombona y Borreguero eran espectaculares y nadie pensaba que iban a bajar tanto los cronos. Fuesen los calentadores, la mayor confianza que inspiran o, simplemente, que José Antonio y Raúl estaban en 'estado de gracia', el caso es que ambos habían rodado hasta dos segundos por debajo de los tiempos del 2007 y muy por delante del resto. Los demás tendrán que 'apretarse los machos' en las siguientes carreras si quieren estar a su altura.

Los diez primeros los completaban el Ibiza Kit Car de Maldonado, que en la Fase B le ganaba la partida a Lirola en el duelo por la segunda plaza del grupo A al que les condena la presencia del World Rally Car de Flores en su misma categoría. Entre ellos acababa Castro, sin competencia en GT (¡a ver si se anima alguien más a competir con él!), y justo tras Maldonado venían ya los tres primeros del grupo N, de nuevo con JJ por delante de los dos extremeños (Noriego y Jiménez) y otra vez en '36' pese a que las gomas ya estaban para pocas bromas. Con cuatro de cuatro en su categoría, el simpático piloto ibicenco camina con paso firme hacia un título que ya se viene mereciendo y que este año no se le puede escapar.

Quedaba ya sólo el habitual y festivo trámite de la entrega de premios y a eso de las tres y pico ya estábamos de vuelta en el hotel, dejábamos descargando las fotos mientras nos tomábamos un tentempié y ya nos pasábamos la tarde redactando y enviando los diferentes comunicados de prensa de los clientes presentes en la prueba. A eso de las diez todo estaba ya enviado y publicado hacía un buen rato en sus respectivas webs ... aunque haya quien no lo mire como, por ejemplo, los de El Comercio de Gijón, ¡que el lunes daban al gijonés Fombona como séptimo en la Fase B! En fin, que le vamos a hacer, la información sobre automovilismo sigue siendo el pariente pobre en la prensa (fórmula 1 aparte claro, mientras dure la Alonsomania), y más en un lunes lleno de reportajes de futbol.

Pero bueno, ya sabemos como son estas cosas. En todo caso, a uno le quedaba el domingo por la noche esa sensación de 'deber cumplido' tras acabar la tarea que servía, junto con unos exquisitos medallones de venado como plato fuerte en la cena, para poner muy satisfactorio cierre a mi Ubrique 2008. Aunque el lunes me tocase un viaje de nueve horas y casi 1000 kilómetros como regalo de cumpleaños, el fin de semana había merecido la pena y me había servido para reencontrar ese buen ambiente y esas buenas sensaciones que suelen dejarme casi siempre las pruebas del nacional de montaña y que en Moratalla había echado bastante de menos.

Ahora llega mi otra 'subida de casa', la de La Santa, en Totana, donde con la novedad de ese nuevo y virado kilómetro final en el recorrido, llegarán también las incógnitas sobre que pilotos y que coches se adaptarán mejor al mismo. Si Fombona vuelve a dominar como en Ubrique el campeonato puede empezar a ir quedando ya bastante sentenciado, al menos en el aspecto sicológico. Veremos si los Borreguero, Aznar, Flores o 'Tano' pueden hacer que la otención del tercer título no parezca fácil para el gijonés.

COPA CM

Oscar Palacio tomó el relevo de Roca, lo que no cambia es la marca ganadora: Silver Car

Caras nuevas en el podio de CM, Egoi Eder y Jordi Martínez flanquean a Oscar

Roca sigue líder pese a no tener un muy buen fin de semana en Ubrique

Pasando a comentar, como siempre en capítulo aparte, todo lo acontecido en la Copa CM, lo más destacable del fin de semana de Ubrique para estos espectaculares coches fue, sin duda, el retorno a lo más alto del podio del campeón 2004 Oscar Palacio. Un retorno por partida doble, ya que el asturiano se impuso en las dos fases, y que disipaba, de golpe, todas las dudas que su floja prestación de Moratalla podían haber levantado. Unas dudas que llegaban al propio piloto, que había vuelto de tierras murcianas bastante desanimado y preguntándose que podía estar pasando. La respuesta, según nos comentaba el sábado por la mañana, antes del inicio de la primera manga de libres, la encontraba en su taller de La Felquera cuando comprobaba la alineación de su Silver y veía, con sorpresa, como el tren trasero estaba totalmente fuera de medidas ... ¡y no en un milímetro o dos precisamente!

Así que con todo ya en orden, Oscar se presentaba en Ubrique dispuesto a ver si podía estar de nuevo 'en la pelea' ...¡y vaya si lo estaba! El asturiano ya era el más rápido en el warmup de la fase A, dejaba que el exhuberante Egoi Eder liderase los entrenos (¡como sube este chaval!) mientras 'ahorraba gomas' y daba el definitivo 'hachazo' en la manga oficial, sumando su primera victoria en el nacional con el coche de moda del campeonato, el Silver Car, invicto en lo que va de temporada.

Oscar era el único que se metía en el 2:20 y dejaba a algo más de un segundo al siguiente, el almeriense Román, que situaba segundo al BRC EVO y acababa con ganas de revancha para el domingo, aunque luego las cosas no le saliesen como esperaba. El podio lo cerraba el actual campeón Pedro Roca, un puesto que para casi cualquiera sería bueno pero que, acostumbrados como estamos desde hace un año a ver su Silver amarillo siempre en cabeza se nos hacía raro. El mallorquín no buscaba excusas cuando le preguntábamos por la causa de verlo 'sólo' tercero y nos decía aquello de 'cualquiera puede tener un mal día', completando la frase con un preminotorio ... '¡o un mal fin de semana!' que hablaba bien a las claras de que no veía fácil mejorar el domingo.

A un paso del podio se quedaba el nuevo piloto de Speed Car, el joven catalán Jordi Martínez, que iba paso a paso cumpliendo los objetivos marcados por Delfín Lahoz: 'se trata de que cada vez esté más cerca en tiempos, en Moratalla acabó a dos segundos, aquí ya está a 1.7 así que seguimos en la línea de progresión que queremos' nos comentaba el constructor catalán.

Quinto era el incombustible Pantxo Egozcue, cerrando un grupo de cabeza en el que faltaba Egoi Eder. Aunque viéndolo pasar por el cruce totalmente 'despendolado' y muy al límite, uno pensase (¡temiese!) que su ausencia de la lista final de tiempos se debiese a una salida de carretera, la causa del abandono era totalmente ajena al arrojo del piloto: se había roto una rótula en la parte delantera derecha de su Silver y ello le había dejado fuera de combate.

El abandono de Egoi permitía a Xoan Sanmartín ganar una plaza a ese séptimo lugar que parece va a ser su sitio este año de forma más o menos habitual. El afable cardiólogo gallego afincado en San Sebastian tiene claro cual es su objetivo: disfrutar, y a ello se aplica marcando además cronos lo suficientemente buenos como para mantenerle siempre un paso por delante de todos los demás participantes de la categoría. Así fue en Moratalla y así volvió a pasar en Ubrique, donde batió a todos los locales, encabezados por el simpatiquísimo Ruiz Bellido (¡malagueño!, ¡no se me olvida!).

Las jerarquías de la CM quedaron tan firmemente establecidas en los tiempos del sábado que todo lo anterior se puede aplicar, casi sin modificaciones a la carrera del domingo ... al menos en lo que respecta al ganador y a los puestos de Xoan para atrás. Oscar volvió a rodar en 2:20 y volvió a ganar, y sólo hubo dos cambios, importantes eso si, en la zona alta de la tabla: la presencia, a apenas dos décimas del líder, de Egoi Eder y su vistoso Silver blanco en la segunda posición, y el primer 'cajón' para Jordi Martínez y el Speed Car naranja, tercero ya a sólo 1.4 (¡cada vez más cerca!) y por delante de Roca que, definitivamente, tenía un mal fin de semana. La entrada en posiciones de podio de los jóvenes Egoi y Jordi significaba que alguien más, aparte de Roca, debía de salir de él, y ese alguien era Román, a quien el domingo no le salían los tiempos y acaba en una retrasada e inusual sexta plaza para la que no tenía explicación y que le dejaba casi 'a tiro' de Xoan, séptimo esta vez al no fallar ninguno del sexteto de cabeza. Bellido, Hatero y Luis Jesús Fernández completaban las posiciones con derecho a puntos en una copa CM que, esta vez, discurría sin mayores polémicas una vez bien claro para todos el tema de los pesos y con los técnicos de la federación comprobando lastres y kilos de cada coche al final de las mangas oficiales ... lo que acabó dejando fuera a alguno de los no habituales del campeonato que, de todas formas, tampoco contaban para las posiciones de cabeza.