Dani se entregaba con entusiasmo a la tarea, mostrándose siempre dispuesto tanto a dar espectáculo como a firmar autógrafos o posar con los aficionados que querían sacarse fotos junto a su ídolo. Sin duda una magnífica iniciativa que alegraba muy mucho un rallye que se presentaba algo 'soso' los días previos al mismo cuando se veía como la participación no iba a ser especialmente numerosa y se acababa anunciando esa lista de inscritos con sólo 39 participantes que junto a un recorrido con esquema más de regional que de nacional, con sólo cuatro tramos distintos a dos pasadas, significaba todo un contraste con otros 'Cantabrias' de temporadas anteriores

Entre los 39 inscritos había al menos algunas novedades interesantes, aunque una de ellas, el EVO X 'N plus' del madrileño Pelaez, quedaba poco menos que inédita, al romperse el motor 'a estrenar' de su Mitsubishi ya en el shakedown. Con otro EVO N plus, pero versión IX y preparado por RMC, salía el gallego Alvaro Muñiz, en el que era el arranque de su temporada 2009. Alvaro tiene previsto un programa de seis carreras con el coche de RMC y en Cantabria empezaba con mal pie, viéndose obligado a abandonar por la tarde luego de dañar la dirección al topar con una piedra en un interior demasiado ceñido.

Una lástima ya que tras un inicio prudente, en el que el piloto reconocía acusar la lógica falta de ritmo luego de tantos meses sin competir, el coruñés ya era sexto scratch y tercero de grupo N a mitad de rallye, claramente por delante del EVO IX de Lujua, que al final del rallye acabaría quinto. Pero entre que Muñiz dudaba en montar agua para el tercer bucle, optando finalmente por los slicks, que al final eran la elección mala de casi todos, y el ya mencionado toque, el abandono era inevitable pese al 'bricolage' a pie de carretera que Alvaro y su copi César llevaron a cabo para intentar seguir en carrera.

Con el Subaru Rally Team Spain compitiendo ya desde el arranque de temporada tanto en tierra como en asfalto, en las semanas previas al Cantabria saltaba la noticia de la presencia a partir del tercer rallye del campeonato de otro equipo oficial de la marca japonesa en España. Se trataba del Subaru Motorsport España, la estructura que el año pasado se encargaba de la ya ‘fallecida’ Impreza Cup, y que alineaba en el rally cántabro un Subaru Impreza N14 ‘made in spain’ para el piloto madrileño Rubén Gracía, habitual el año pasado en la Nissan Challenge y que aportaba al equipo el patrocinio de la bebida energética Burn.

El rallye de Gracia con el Subaru fue corto, ya que un toque en la cuarta especial dejó fuera al madrileño que, al menos, dio muestras de sus posibilidades con un sorprendente cuarto mejor crono en la segunda especial, y que marchaba noveno de la general en el momento de su abandono.

Se trataba, concretamente, de la unidad que utilizó con muy poca fortuna en el 2008 el gallego Reiriz, y con la que Diego se permitía el lujo de marcar más de un crono realmente espectacular, terminando finalmente octavo scratch y segundo de producción, sólo superado por el EVO X de Senra pero batiendo al resto de coches de la copa de RMC, algo que la pasada campaña nunca consiguió ninguno de los participantes en la Impreza Cup.

Alicientes todos ellos que han acabado animando a siete pilotos a tomar parte en la copa, que tuvo en Cantabria su primer asalto con el gallego Víctor Senra como ganador. Inicialmente empezó liderando uno de los que repiten del año pasado, Diego Cabanela, pero cuando empezó a llover por la tarde, Víctor estuvo más acertado en la elección de neumáticos y sentenció a su favor. Tercero y rodando un poco en tierra de nadie todo el día, acabó Carlos Márquez, mientras que cuarto fue el mexicano Benito Guerra, contento de terminar su primer rallye de asfalto en España.
Cerró la clasificación Antonio Pérez, que se dio el gusto de meterse entre los diez mejores scratch en el tramo con más lluvia al ser de los pocos en montar gomas de agua. Los otros dos participantes no consiguieron terminar, en ambos casos por accidente. El primero en caer fue Aguado, que se dio un buen susto al perder el control de su EVO X en una zona muy rápida del primer tramo, golpeando contra la montaña, mientras que por la tarde quedaba fuera el andorrano Bercianos, dañando una rueda en una arqueta como colofón a un fin de semana para olvidar, que había empezado ya del peor modo en el shakedown, cuando se salió al encontrar la carretera con el aceite vertida por el motor roto de Pelaez. Tras poder tomar la salida el sábado gracias al trabajo de los mecánicos y la gran cantidad de recambio que RMC lleva en sus camiones para asistir a los siete coches de la copa, Alex pinchó en el primer tramo y después tuvo ese otro toque que ya le mandó definitivamente para casa ¡vaya día!
Los chicos del PRR no descansarán mucho tras el duro Cantabria, ya que el sábado tendrán su primer rallye de tierra, en Guijuelo, segunda cita del nacional de la especialidad.