Ausente desde el 2002 del Campeonato de España, la subida a Chantada 2009 suponía el esperado retorno del nacional de montaña a Galicia. Un retorno que tendrá su continuidad dentro de apenas un mes con la disputa de la siguiente cita del calendario 2009, la subida a Cortegada, en las inmediaciones de Orense.

Para su vuelta al nacional Chantada (al igual que Cortegada) había pasado la temporada anterior la correspondiente preinspección y superaba este año con buena nota el siempre complicado compromiso de sacar adelante una prueba de estas características. Para ello, la eficiente organización de Escudería Chantada se apoyaba, además de en sus propios efectivos, en el equipo del Automóvil Club de Totana, que aportaba su granito de arena y su experiencia en el apartado de seguridad, siempre bien cuidado en su prueba, la subida a La Santa. La clásica cita murciana del campeonato se ha 'caído' este año del nacional por problemas de índole sobre todo económica, aunque es intención de la gente del ACT celebrarla a final de temporada con validez regional.

Luego de un largo invierno tratando de resolver los diferentes problemas, especialmente a nivel de caja de cambios, que le amargaron la pasada campaña, Pedro había reparecido unas fechas antes de Chantada en la prueba regional de A Estrada. Una reaparición no exenta de problemas, ya que entre unas bombas de gasolina de funcionamiento 'caprichoso' y una climatología cambiante que complicaba la elección de gomas, el piloto compostelano no había tenido mucha opción de probar en condiciones su coche como era su objetivo.
Así que falto de kilómetros al volante y sin tener la completa seguridad de que el Nissan funcionaría a la perfección, Castañón se presentó en Chantada dispuesto a retomar contacto con el Campeonato de España del mejor modo posible. Algo que, pese a todos sus intentos, no conseguía, víctima de nuevo de problemas mecánicos relacionados con la transmisión. En esta ocasión se trataba de una cada vez más preocupante fisura en la carcasa del cambio que le acababa por obligar a irse para casa antes de tiempo, tras completar a duras penas las mangas del sábado, terminando noveno la subida oficial con un crono peor que el que había marcado en entrenos y le había situado en una prometedora sexta plaza, en el mismo segundo que el cuarto clasificado.

La no participación de Manuel se debía a un problema de 'papeleo', ya que su licencia regional restringida no era adecuada para tomar parte en una prueba de Campeonato de España, por lo que no pasaba las verificaciones administrativas. De todas formas, su hijo Víctor dejaba bien alto el pabellón familiar, siendo el mejor de los pilotos gallegos y clasificándose cuarto en ambas fases, justo tras el trío de inalcanzables Audis de Fombona, Borreguero y Aznar. Un magnífico resultado con el que irse de vacaciones antes de volver a ponerse al volante del EVO X del Producción Rally Racing en el próximo rallye de Ferrol, la siguiente cita del certamen de RMC en el que Senra Jr. es segundo de la general.

El piloto gallego, que antes de embarcarse en su programa nacional con RMC hizo un buen número de pruebas de montaña con un A1/2, nos comentaba que se lo había pasado realmente en grande y que las sensaciones que producen los CM le habían sorprendido muy gratamente, ¡desde luego nada que ver con la conducción del EVO X que utliza este año en el PRR! De todas formas, aun habiéndose divertido, como era su objetivo, Antonio nos confesaba su predilección por los rallyes, más que nada porque los largos 'tiempos muertos' de la montaña la acaban por hacer más aburrida, no descartando, de todas formas, volver a repetir la experiencia en alguna otra subida, bien sea nacional o regional

Cuando en la manga de entrenos libre del viernes, el EVO IX de Rosales se averiaba mientras que el de Iván completaba la subida con el cuarto mejor crono absoluto, todo parecía ir de cara para el asturiano ... pero de vuelta a la zona de asistencia Iván se encontraba con una desagradable sorpresa: la Guadia Civil de Tráfico requería su presencia debido a que habían comprobado que su carnet de conducir estaba retirado. Por mucho que se tratase de una prueba de montaña, disputada en 'circuito cerrado', los agentes de la Benémerita no accedían a que el de Colloto pudiese seguir conduciendo 'sin carnet', con lo que de nuevo Iván acababa siendo noticia por hechos ajenos a sus prestaciones en el asfalto y se tenía que perder el resto del fin de semana de competición, diciendo poco menos que adios a cualquier opción de hacerse con el título de grupo N.