Desde que SIF Motor recuperó las históricas rampas de la cara Norte del Fito para el regional de montaña sólo el año pasado tuve ocasión de acudir a la subida. Este año, al igual que en los dos primeros del retorno de los coches de competición a la vertiente que mira al mar de la montaña del Sueve, la coincidencia de fechas con una prueba nacional me llevaba lejos de la carretera que parte de Colunga y llega al mirador desde el que se domina el espectacular paisaje de toda la zona.

Oscar Palacio se aseguró su tercer título de Campeón de Asturias	Roberto Fueyo ganó en CM y es ya prácticamente subcampeón	Fermín Busta certificó también la tercera plaza en el regional con otro podio

Y el caso es que, este año, si uno se limita a ‘los números’ y su consecuencia en el resultado final de cada prueba, los resúmenes del regional de montaña casi se hacen sólos y acaban por parecerse muchísimo unos a otros. El nombre del ganador no cambia, el del segundo y tercero apenas si lo hace y el desenlace de cada subida termina por ser poco menos que calcado. En el Fito Norte, la lectura de la clasificación final cuenta precisamente esa misma historia ya muy vista a lo largo de todo el año: victoria de Oscar Palacio, con mayor diferencia cuando compite con la Osella como era el caso de nuevo en el Sueve, segunda posición para Roberto Fueyo, primer CM si Oscar sube con la barqueta,  tercer escalón del podio para Fermín Busta, que ha irrumpido con la suficiente fuerza en el regional como para ser ’el primero del resto’ en la mayoría de las subidas, y victoria en carrozados para Jesús Fernández, imbatible entre los turismos con su Audi A4 cada vez que participa en una subida del campeonato.

Sin embargo, aunque el planteamiento de la subida era similar a las anteriores citas del campeonato y el desenlace de esta cuarta edición del Sueve ‘seguía el guión previsto’, el ‘nudo’ de la historia era algo diferente, con unas cuantas alternativas que le daban una ligera variación a este séptimo capítulo del regional 2008.

De entrada, con un día de sol espléndido que permitía disfrutar tanto de la carrera como del espectacular panorama del litoral asturiano que ofrecen las populares ‘paellas’ de la parte final de la cara norte del Fito, la subida tenía un claro favorito en Oscar Palacio, ganador ya el año pasado y que retornaba de nuevo al volante de la Osella PA20 de Adolfo Posada. En la lista de inscritos sólo había otro coche con potencial siquiera equiparable, al menos en teoría, el tan espectacular como frágil fórmula Gould de Víctor Abraham, que está dándole a su veterano piloto más disgustos que alegrías desde que lo estrenase hace unos meses precisamente ‘en la otra cara’ del Fito. Como el monoplaza británico iba a volver a fallar, rompiéndose ya en entrenos, no quedaban más que los CM como posible alternativa a la potente barqueta … y en unas rampas en las que los caballos mandan como son las del Sueve desde el lado de Colunga, pensar que alguno de ellos pudiese batir a la Osella era más que utópico.

Pero, como dicen los ingleses, que en esto de las carreras de coches nos llevan años de ventaja, ’para llegar primero, primero hay que llegar’ … así que cuando la PA20 se quedaba ’tirada’ en la salida de la primera oficial, debido a una rotura de palier, la sombra de una posible sorpresa en el resultado final planeaba sobre el Mirador del Fito. Sin Oscar en liza, la batalla estaba mucho más abierta entre la ‘jauría’ de CMs, que se dividía, a su vez, en los dos grupos más o menos habituales de las anteriores subidas del campeonato. Por delante, Fueyo marcaba la pauta con el Silver, seguido del BRC de Busta, que estaba supermotivado por brillar en la subida ’de casa’ y había batido (¡por tres milésimas!) a ‘Rober’ en entrenos, pero tenía que hacer frente en la primera oficial al absurdo orden de salida que situaba muy arriba en la lista al debutante David Mateos, quien subía con el Speedcar de Jesús Alvarez, a un ritmo muy inferior al de los que le seguían, lo que implicaba la lógica perdida de tiempo para superarle, tanto en el caso de Busta como en el de Otero, que partía inmediatamente a continuación. Aun así, Busta era segundo a poco más de segundo y medio de  Fueyo, así que nada estaba claro en cuanto a cual de los dos iba a quedar por delante, como primer CM … o como ganador si Palacio no podía estar presente tampoco en la segunda oficial. Además, había otro CM más en la lucha, el Silver de ‘Chemari’, a sólo cuatro décimas del BRC de Fermín, con lo que la situación estaba aun mucho más abierta.

El ‘segundo grupo’ de CMs lo encabezaba un asiduo del primero, Javier Otero, con un Speedcar del primer modelo que ya va acusando el paso del tiempo y la mejoría experimentada por las posteriores evoluciones de la siempre vivaz categoría reservada a los ‘protos’ con motor de moto y que, además, se veía perjudicado por el 'doblaje' a Mateos ya comentado. Ello dejaba a Otero precediendo, por poco, a Armas, Cueva y Casal (en franca progresión al volante del Silver) … pero todos ellos cedían ante el espectacular registro de Jesús Fernández, dominador incontestable en carrozados ¡y nada menos que cuarto scratch con el Audi A4!

El increíble crono de ’Tano’ se ponía aun más en relieve viendo como la diferencia sobre el siguiente turismo, el Mitsubishi del siempre rápido Félix Alvarez, era de más de nueve segundos … ¡una auténtica barbaridad! Tercero entre los carrozados era un ya habitual visitante de varias de nuestras subidas regionales, el Porsche del madrileño Angel Castro, pero tanto él como Félix estaban ya fuera de los diez primeros de la general, superados por otros tres CM además de los ya comentados, los de José Aguilar, Carlos Rodríguez e Ignacio Biain.

'Tano' impuso su ley en carrozados con un tiempazo en la primera oficial	Segunda victoria consecutiva en no homologados para Rafael Bustelo	Los 'traseras' dieron espectáculo, llevándose además el Sierra de Isidoro Beteta el grupo S

La manga definitiva se disputaba ya bien avanzada la tarde y con la temperatura bajando, lo que tal vez contribuyese a que los tiempos no mejorasen, o lo hiciesen menos de lo esperado. La Osella de Palacio estaba ya reparada y lista cuando llegaba su turno de subir y Oscar no fallaba, parando el crono en un 2:10:966, que aunque lejos de su 2:07 del año pasado seguía estando totalmente fuera del alcance de los mejores CM. Entre estos, tanto Fueyo como Busta mejoraban en más de un segundo sus tiempos anteriores, con lo que del Silver se mantenía por delante del BRC, completando ambos el podio scratch en la segunda y tercera plaza, posiciones a las que han sido asiduos este segundo año de ’dictadura Palacio’ en el Campeonato de Asturias de Montaña.

El podio de CM lo completaba José María Castro, que ya había estado cerca de su límite en la primera oficial y ‘sólo’ recortaba cuatro décimas en la segunda, suficiente en todo caso para conservar el tercer puesto del grupo y ser cuarto de la general, una posición también ya repetida para ’Chemari’ este año.

Tampoco había cambios en las posiciones del resto de CMs, con Otero de nuevo por delante de Armás, Cueva, Casal, Aguilar y Rodríguez. Eso si, Javier se destacaba claramente del resto, siendo quien más tiempo ganaba en la segunda oficial, en la que ya no tenía que 'doblar' a nadie al aumentarse el tiempo de separación entre Mateos y el resto, lo que le permitía subir a su ritmo para pasar a juntarse al primer grupo, el de los que estaban por debajo del 2:20, adelantando de paso en la general scratch a ’Tano’, que sufría una más de la plaga de roturas de palier del día, aunque no veía peligrar su victoria en carrozados, ya que ni Félix Alvarez ni Angel Castro podían, siquiera, acercarse a su estratosférico crono de la primera manga.

La única categoría en la que se producían cambios en la subida final era la de no homologados. En la ascensión inicial, Isidoro Beteta (Ford Sierra) había sido el más rápido por delante de Fermín Galán con su R11, que en la segunda quedaba fuera de combate y sin opción a clasificarse, aunque, de todas formas, su crono anterior tampoco le hubiese permitido mantener la segunda posición. Tanto el suyo como el del Sierra de Beteta fueron rebajados por el Simca Rallye de Rafael Bustelo, recuperándose de su problemática primera manga para ganar en la segunda, sumando su segundo triunfo consecutivo tras el alcanzado en Castrillón. Este aun más meritorio dada la importante competencia presente, encabezada por dos de los varios y siempre espectaculares Sierra, los de Isidoro Beteta y Minervino Ferrera.