Tres grandes premios disputados, tres vencedores distintos, tres marcas diferentes en las tres primeras posiciones de la parrilla de salida, los cinco primeros del mundial de pilotos separados por sólo cinco puntos, BMW liderando el mundial de constructores ... si nos fijamos en todos estos datos diríamos que estamos ante la fórmula 1 que todos los verdaderos aficionados quieren ver: igualada, apasionante, imprevisible. Y, sin embargo, un balance tan diverso en cuanto a resultados y una situación tan igualada en la cabeza de tabla, llega tras un gran premio de Bahrein que pocas emociones deparó en la pista, más allá de las habituales escaramuzas de la primera vuelta, amplificadas esta vez por ese toque Alonso-Hamilton que ya hace correr ríos de tinta cuando, realmente, no dejó de ser una anécdota en el desarrollo de una carrera dominada de punta a cabo por los Ferrari ...¡y por Felipe Massa!

Dominio total de los Ferrari en Shakir...	...victoria muy necesaria para Massa...	...y liderato del mundial para Raikkonen

LA 'RESURRECCION' DE MASSA

Comentaba yo, medio en broma medio en serio, en el último programa de 'Fórmula 10' en el que tengo el gusto de intervenir, que igual Massa iba a volver a 'dejarnos mal' tras tanta crítica a su pilotaje, ganando en Bahrein como ya hizo el año pasado, en una especie de 'resurrección' luego de su floja actuación en Malasia. Este año, para el brasileño las urgencias eran aun mayores, tras un doble fiasco en las dos primeras carreras del año que le hacían encarar la tercera prueba del mundial con la tremenda presión de llevar ya dos 'ceros' y no poder permitirse más errores. Y Felipe, efectivamente, 'nos dejó mal', respondiendo del mejor modo posible a las críticas y siendo durante todo el fin de semana más rápido que su compañero de equipo Raikkonen ... lo que teniendo en cuenta la superioridad evidenciada por los Ferrari durante la carrera se convirtio en sinónimo de victoria clara y convincente que le permite 'reengancharse' en un campeonato que, de momento, no tiene un dominador claro, al menos en lo que a la suma de puntos de la general respecta.

Pero, de todas formas, me parece más que evidente que si bien Massa no era 'tan malo' como sus fallos de Australia y Malasia podían poner en evidencia, tampoco es 'tan bueno' como para repetir de forma habitual su impecable prestación de Sahkir. Personalmente sigo pensando que Felipe está donde está por haber llegado en el momento justo, cuando Schumacher necesitaba otro 'número 2' que no supusiese la más mínima posibilidad de dudas en cuanto a su total liderazgo en la 'scudería'. Pero sigo albergando muy serias dudas respecto a que alguna vaya ir más allá de ese papel, salvo fugaces momentos de gloria como el de hoy o los que tuvo a principio de temporada pasada, en esta misma pista de Bahrein o en la de Montmeló. A Felipe le seguirá faltando el talento y la consistencia que hacen falta para imponerse a alguien tan rápido como Raikkonen y, o mucho me equivoco, o su papel en este mundial 2008 volverá a ser, muy a su pesar, el de número 2.
Pero de ahí a 'enterrarlo' y a convertirlo en un mero comparsa ha de mediar un abismo. Rapidez no le falta, lleva entre manos el, ahora mismo, mejor coche de la parrilla, y aunque la ausencia de ayudas electrónicas pueda ser en su caso más problema que en el de otros más 'dotados', eso no va a significar que vaya a fallar siempre. En Sahkir, la que ya parece su pista talismán, apenas si cometió un banal error sin mayores consecuencia en la parte inicial de la carrera, dominando con autoridad y sumando un triunfo que necesitaba más que nadie.

RAIKKONEN LIDER DEL CAMPEONATO

Hace tiempo que los campeonatos se ganan, sobre todo, sabiendo conformarse cuando tratar de conseguir algo más puede exigir más riesgos de lo que la recompensa merece. Jugársela por dos puntos 'extra', los que separan al segundo del primero, no siempre es rentable en un certamen que premia muy mucho la regularidad.
Si además el que va primero es tu compañero de equipo, el factor riesgo se multiplica en estos tiempos tan 'políticamente correctos' en los que eso de que dos pilotos de la misma escudería se peleen de igual a igual en la pista está casi diría que 'mal visto'.
Así que no me extrañaría nada que Raikkonen tuviese todo eso en mente para no arriesgar más de lo necesario en una pista en la que, además, nunca ha brillado en exceso y en la que, en cambio, Massa se mueve como pez en el agua. Kimi hizo alguna que otra tentativa, sobre todo antes del segundo repostaje, pero entre que Felipe respondía a cada vuelta rápida del finés con otra ligeramente más lenta pero muy parecida, y que el 'tráfico' estorbó al menos en un par de ocasiones al actual campeón mundial, este no tuvo más opción que acabar resignándose y sumar ocho puntos que le dan el liderato.
Con los McLaren mostrándose bastante menos fuertes de lo que Australia dejó entrever, y con los BMW acechando pero sin poder, aun, estar en el ritmo de los Ferrari de forma constante a lo largo de todo un gran premio, el binomio Raikkonen-Ferrari se empieza a perfilar como el gran favorito para el título ... aunque hacer una predicción así tras sólo tres carreras sea más que aventurado.

BMW sigue paso a paso camino del triunfo, en Shakir pole para Kubica...	...que redondeó su actuación con otro podio al acabar tercero...	...y liderato en constructores gracias también a los puntos del cuarto puesto de Heidfeld

BMW CADA VEZ MAS CERCA...

Definitivamente los BMW-Sauber siguen progresando. El liderato del mundial de constructores para la marca bávara es todo un hito que se debe más a regularidad y consistencia (los BMW son los únicos que no han fallado hasta ahora en ningún circuito) que prestación pura. Pero la pole de Kubica, la primera suya y de su equipo, obtenida además con una carga de combustible en la línea del resto de ocupantes de las primeras filas, fue total y absolutamente 'real'. El coche 'anda', el polaco es todo un 'killer' con una 'garra' de esas que engancha al aficionado, y el mejor tiempo de la calificación del sábado fue el primer' premio gordo' que recibe a cambio de todo lo bueno que viene aportando a la F1 desde su debut hace apenas un par de temporadas. Si además Robert es, como dicen los que lo conocen, un 'tio genial', pues mejor que mejor en un mundillo en el que cada vez parece más difícil ser 'buena gente' rodeados como están unos y otros de tanta 'piraña'.

Lástima para el polaco que su arrancada no fuese todo lo buena que era de esperar, viéndose superado de inmediato por Massa y poco después por Raikkonen lo que comprometió muy seriamente sus opciones de tratar de inquietar a los 'coches rojos'. De todas formas, el ritmo de carrera de Kubica hasta el primer repostaje, sin perder nunca del todo el contacto con Raikkonen, me hizo pensar, durante en rato, que igual el BMW 'ya estaba ahí'. Pero luego una pequeña 'excursión fuera de programa' del polaco le hizo ceder unos segundos que ya no habría forma de recuperar y a partir de ese momento, para Kubica la atención estaba detrás y no delante. Porque detrás, dispuesto a todo, venía el otro BMW, el del nunca suficientemente valorado Nick Heidfeld.
Reconozco que soy de los muchos que nunca vieron en el alemán a un piloto con 'proyección'. Si, de acuerdo, ganó 'facil' la F3000 en su día, pero con todo el apoyo de Mercedes detrás, la sensación de aquella temporada fue de que siempre contó con una notable superioridad técnica. Y luego, ya en la F1, su carrera fue la mayoría de las veces gris y hasta un tanto errática. Y, cuando, pese a ser 'hombre Mercedes' y mejor que Raikkonen, fríos números en la mano el año en que ambos coincidieron en Sauber, fue Kimi el elegido por McLaren para sustituir a Hakkinen, todo parecía haberse acabado para 'Nick the quick'. Pero si algo ha caracterizado siempre al alemán ha sido ese no rendirse nunca y no fallar apenas, cualidades que acabaron por hacerle ganarse la estima de gente que sabe tanto de carreras como Frank Williams y Patrick Head. Así que cuando BMW se 'divorció' de Williams, a Heidfeld le llegó esa última oportunidad que parecía no iba a tener nunca ... y ahí está, a la chita callando, aprovechándola cada vez mejor. Su inicio de temporada está siendo 'marca de la casa': sin fallos, sin brillo pero con eficacia. ¿El resultado? un segundo puesto en la general provisional, a sólo tres puntos del líder, por el que, sinceramente, no hubiese apostado jamás.

Así las cosas, con Kubica, Heidfeld y BMW saliendo de Bahrein metidos de lleno en la lucha por el título, la duda está en saber si serán capaces de mantener el ritmo y, sobre todo, de dar ese tan difícil como necesario último paso que separa la tercera y segunda plaza de la primera. Puestos a tratar de adivinar el futuro, yo diría que lo van a tener complicado ... pero también pensaba, tras los entrenos de invierno, que los BMW iban a irse este año para atrás, así que no me extrañaría que me volviese a equivocar y veamos, más pronto que tarde a uno de los dos pilotos de Mario Theissen logrando esa primera victoria tan anhelada como difícil de conseguir.

Kovalainen no inquietó nunca a los cuatro primeros...	...aunque acabó marcando la vuelta rápida cuando montó las gomas duras a final de carrera	Hamilton arruinó todas sus opciones con una primera vuelta desastrosa

...Y McLAREN CEDIENDO TERRENO

Tras dominar con total autoridad en Albert Park, perdiendo sólo el doblete por la inoportuna salida del último safety car, los McLaren parecían un paso por delante del resto. Pero luego llegó su 'mal día' de Sepang, en un fin de semana que se les torció ya desde los entrenos y que se les complicó aun más en carrera, sobre a todo a Hamilton con aquel problema en el cambio de ruedas que le relegó mucho más atrás de lo que su ritmo de carrera le hubiese permitido estar.
Entonces ya nos quedó la duda de si, de todas formas, las flechas plateadas tenían la velocidad de los Ferrari, una duda que se acrecienta tras este otro 'mal día' que las huestes de Ron Dennis han tenido en Sahkir. Realmente, más que 'mal día' Hamilton tuvo un 'mal fin de semana', empezando con un fuerte golpe en los libres del viernes y acabando con esa desastrosa primera vuelta de carrera. El inglés volvió a ser víctima de esa letal combinación que son sus excesivas 'prisas' cuando se le tuercen las cosas de salida, y el mucho mayor 'oficio' de Alonso en ese tipo de situaciones. El resultado fue un accidente que no hace sino dar más que hablar sobre una rivalidad que, a día de hoy, no existe en la pista dada la abismal diferencia en la competitivad de la montura de uno y otro ... salvo en circunstancias muy particulares como la que llevó a ese encontronazo de la primera vuelta en Bahrein.
Darle vueltas y más vueltas a si la culpa fue de uno o de otro no tiene mayor sentido que el de seguir alimentando la polémica y tapar la evidencia: Alonso este año no va a estar por delante de Hamilton casi nunca ... por no decir nunca. Pero las pocos veces que pueda estarlo las va a aprovechar al máximo para desestabilizar al británico, y el incidente de hoy debe de ser visto en esa línea. Lewis volvió a no saber esperar su oportunidad, se puso a merced de Fernando con sus ansias por pasar cuanto antes y el resultado fue ver totalmente arruinada su carrera y perder el liderato del mundial ... ¡exactamente igual que le pasó en Brasil en el último gran premio del año pasado! Hamilton necesita templar su fogosidad en esos lances de inicio de carrera, pensar que tiene coche y tiempo para remontar cuando las cosas no le empiezan de cara, y no querer recuperar de golpe y con tanta prisa. Si para el espectáculo es bueno que un piloto sea 'impaciente' y no se conforme con esperar a una situación favorable para tratar de adelantar, para la tabla de puntos ese estilo 'generoso' sirve de poco, algo que el inglés debió de haber aprendido ya tras 'lo de Brasil'.

Con Hamilton hundido en la clasificación y rodando con un coche supercargado de combustible y, probáblemente 'herido' por el fuerte impacto, el pabellón de McLaren quedó en manos de Kovalainen. Y la carrera del finés fue, cuando menos, extraña. Tras dos tercios de la misma con un ritmo cada vez más lejano de los Ferrari y los BMW, que le ponía, incluso, al alcance del Toyota de Trulli, Heikki se 'destapó' en el último 'stint', montando las ruedas duras y siendo entonces hasta segundo por vuelta más rápido que los BMW cuando estos no iban precisamente de paseo en su lucha por la tercera plaza. Así que con Hamilton 'autoeliminado' y Heikki 'desaparecido' por buena parte de la carrera, resulta complicado saber, otra vez, si lo de McLaren volvió a ser un mal día o si, de verdad, han perdido 'fuelle' y ya no son ni la primera ni la segunda potencia del campeonato. ¡Veremos en Montmeló!

Trulli volvió a estar cerca de los mejores y acabó sexto con su Toyota	Rosberg y el Williams retornaron a la zona de puntos acabando octavos	Webber no se metió en la Q3 pero remontó para acabar séptimo con el RedBull

TOYOTA SE CONSOLIDA, WIILIAMS VUELVE ...

Por tercera vez consecutiva en la Q3, por segunda vez en dos carreras entre los mejores, por primera vez con los dos coches en la meta: Toyota 'progresa adecuadamente', con un Trulli que sigue dando muestras de su inmenso y, a veces, poco aprovechado talento, y hasta con un Glock que, una vez más, no consiguió dejar de lado su habitual gafe y aunque consiguió terminar su primera carrera del año, se quedó sin el premio extra de sumar un punto por problemas de cambio cerca del final. En todo caso, el equipo japonés parece estar este año en la buena senda, dispuesto a pelear por ser 'el mejor del resto' tras el inalcanzable trio de cabeza.

Y para ser ese 'mejor del resto', Toyota tiene el enemigo 'en casa'. Sus 'clientes' de Williams son, de momento, los cuartos del campeonato, tras recuperase en Bahrein del inesperado tropezón de Malasia. En Sahkir Rosberg volvió a estar en el grupo de cabeza, sumando un nuevo punto y permitiendo a su equipo mantener ese puesto tras los tres primeros que se presenta como uno de los más competidos. Un puesto al que también aspiran los RedBull, séptimos esta vez con el siempre coriaceo Mark Webber, un piloto que merece mejor suerte de la que suele tener y que, por una vez, obtuvo en carrera mejor resultado que en entrenos, acabando séptimo tras calificar undécimo.

Glock se quedó a un paso de puntuar	Alonso no tuvo opción alguna a conseguir un mejor resultado con un coche que no va	Meritoria actuación de Fisichella, achuchando incluso al Renault con su Force India

...Y RENAULT VA CADA VEZ PEOR

Hasta el magro consuelo de ser 'el mejor del resto' parece, en cambio, una meta cada vez más lejana para Renault. Alonso volvió a conseguir el 'milagro' de meterse en la Q3 con el R28, aunque fuese de nuevo por los pelos. Pero su ritmo de carrera fue tan malo como para acabar exactamente en el mismo puesto de salida, pese a que dos de los que calificaron delante de él fallaron en carrera (Hamilton y Button). Su mejor vuelta fue la decimotercera más rápida ... ¡o la novena más lenta que resulta más significativo! justo tras la de su compañero Nelsinho Piquet, autor de otra carrera bastante errática. Y, lo que es peor, la sensación de que Fernando no podía pelearse con nadie volvió a acrecentarse. Hasta Fisichella con el Force India se convirtió, por momentos en una amenaza y sólo los daños en el alerón trasero tras la 'embestida' de Hamilton pueden servir de paliativo a una nueva demostración de que ni el asturiano ni nadie van a hacer de este Renault un coche no ya capaz de ganar sino, siquiera, de luchar de forma consistente por los puntos.

O esas 'milagrosas' evoluciones previstas para Montmeló funcionan mejor de lo que los más optimistas esperan o esto no hay quien lo arregle y al español le espera una temporada de auténtico purgatorio en la que las pocas satisfacciones que les pueden quedar a sus incondicionales serán, como hoy, regodearse en los fallos del 'odiado' Lewis Hamilton ... triste consuelo en todo caso.

Button se metió en la Q3 pero duró poco en carrera	Massa se puso líder de salida...	...y sólo Raikkonen y Kubica intercambiaron posiciones respecto a los primeros metros de carrera

LLEGA EL GRAN PREMIO DE ESPAÑA

Tras las tres carreras iniciales, el campeonato inicia lo que en tiempos se llamaba 'la temporada europea'. Entonces era habitual que no fuese hasta la primera carrera del 'viejo continente' cuando apareciesen muchos de los nuevos coches que iban a disputar el resto de la temporada, por lo que la significación de esta carrera siempre era mucho mayor.
Hoy día, todos los equipos siguen presentnado novedades en esta primera prueba europea, pero ya no son, por fuerza, tan radicales como era el hacer debutar un nuevo monoplaza que podía cambiar, de golpe, tu fortuna para bien o para mal. Ahora se trata de esas 'evoluciones' que, en el mejor de los casos, te hacen ganar un par de 'decimitas' a un precio exhorbitante ... sólo para ver como tus rivales se han gastado tanto o más dinero para obtener similar o mejor resultado.
Ese y no otro es el escenario que me espero para el gran premio de España, lo que significaria ver de nuevo a Ferrari, McLaren-Mercedes y BMW-Sauber muy por delante del resto. Otra cosa no dejaría de ser una gran sorpresa aunque interese alimentarla en pro de asegurar un nuevo lleno total en las tribunas de Montmeló. Sólo espero que ese lleno se produzca y que los que lo protagonicen vayan al trazado catalán a disfrutar de la fórmula 1 del modo más sano posible. Esa sería la mejor noticia independientemente del resultado final de la carrera.