Desde 'crío' el 'Príncipe' siempre ha sido 'mi rallye', y cuando preparaba su web de este año y veía el precioso vídeo realizado por Luis Rivaya que se incluye en ella, no podía evitar recordar con nostalgia aquellos 'Príncipes' de los 'buenos viejos tiempos'. Recordaba cuando con mi hermano Fernando nos cogimos el ALSA Gijón-Oviedo con paradas (¡me faltaban aun un par de años para tener carnet y coche!) que nos llevó cerca de la salida de la edición del 81 desde las instalaciones de la Renault, donde vimos, por primera vez, el 5 Turbo oficial de "Genito", ese que en el vídeo se ve bajar de aquel podio de salida. O cuando, con mis amigos 'de siempre' Benjamín y Javier, nos íbamos cada año en el coche del padre del primero (¡un 'venerable' Ford Cortina!) a verlos bajar Miravalles o la Encrucijada.

Recuedos cuyas buenas sensaciones el tiempo, probáblemente, amplifica, porque ahora ya no te acuerdas ni del frío de la larga espera en plena noche ni de cualquier otra incomodidad, y sólo te queda en la memoria el lejano eco del sonido del Sumbean Lotus de Zanini rompiendo de golpe el silencio y precediendo, por unos interminables segundos, al resplandor de aquellos Cibié que iluminaban la curva por un instante tan breve como intenso mientras Antonio volaba más que rodaba por aquella "caleya". Luego vino 'el Príncipe de los Ferrari', del que recuerdo tanto o más ver bajar hacia Villaviciosa al 308GTB de Zanini 'herido' como 'alucinar' con David Llewelin y aquel Escort del Brittish Junior Team o jalear a Fombona y el R5 Turbo de la Red Renault Asturias. Aquel, quien sabe por qué, acabó por ser mi último 'Príncipe' de cuneta en muchos años. Parecía que 'ya lo había visto todo' y que lo que vino después, con ser todavía 'bueno' ya no lo era tanto o, simplemente, ya motivaba menos a este 'circuitero de toda la vida', y salvo aquel tramo espectáculo de los alrededores del Molinón, poco más vi del 'Príncipe' que lo que salía en las revistas del motor que seguía 'devorando' como siempre.

Pero el destino es caprichoso, y en el 2002, cuando con mi entonces socio Javier empezamos esta 'aventura' de "citadecampeones.com", el primer rallye al que acudimos, (animados por el que era corresponsal de AutoHebdo en Asturias) para 'probarnos' haciendo un reportaje que no fuese de una subida, acabó por ser el 'Príncipe' justo en el año en que la gente de Julián Moreno partía poco menos que de cero tras el 'descenso a los infiernos' que supuso la pérdida de la puntuabilidad nacional. De aquella experiencia salió un 'megareportaje' en el que pusimos todo nuestro esfuerzo e ilusión y que gustó lo suficiente a la gente del ACPA como para que, ante nuestra sorpresa, nos contratasen para hacer la web oficial del 40 aniversario del rallye, que coincidía, además, con el retorno del 'Príncipe' al nacional. Una excelente noticia a nivel profesional pero que, a nivel personal, suponía la 'tortura' de no haber vuelto a pisar un tramo del Príncipe desde entonces, justo cuando me había vuelto a 'picar el gusanillo de las cunetas' y, además, se iniciaba un parábola ascendente en la prueba que, estoy seguro, va a culminar el año que viene con esa primera edición del 'Príncipe IRC' para la que ya muchos estamos contando los días que faltan ...¡y de la que, me temo, tampoco voy a ver ni un sólo tramo a pie de asfalto!

Ojeda y Barrabes saludando desde el podio final, el líder del IRC arrasó en el Príncipe 2007	Berti y Pin todavía pueden optar al título ... ¡si consiguen seguir compitiendo claro!	Los Vallejo hicieron 'su rally' metidos en la lista autonómica ¡y ya lideran el nacional!

Este año era ya el quinto en el que mi actual socio Gerald y yo nos encargábamos de la web del rallye, un trabajo que, a base de las continuas charlas con el Director de Carrera, Carlos Tamargo, para comentar los diferentes pormenores de la nueva edición, 'te mete' en la prueba desde un mes antes de la misma mucho más de lo que lo haces con cualquier otro rallye del campeonato . Algo que notaba especialmente este año con la inclusión en la web de los 'inscritos on-line' y ese sentimiento de anticipación que tenía todos los días al abrir el fichero Excell que Ana enviaba cada tarde desde la secretaría del club organizador con las últimas altas en la lista de participantes. Aunque, al final, no estuviesen en esa lista tantos coches y pilotos del IRC como a todos nos hubiese gustado, la presencia en ella de los Peugeot 207 S2000 de Ojeda y Solá (¡vaya sorpresa!) ya servía para ir animando mucho el ambiente.

Si además volvía a correr (¡por fin!) Sergio Fombona pues la cosa se calentaba aun más ... sobre todo porque apoyando a Sergio estaba, como siempre, Juan Tarrazo desde Ibiza ¡y su pasión y entusiasmo ya si que 'te meten en el rallye' a fondo desde una semana antes! Había que diseñar la decoración del coche con tiempo para que 'Luisper' la convirtiese en realidad antes de tomarse unas merecidas vacaciones, y ya ir preparándolo todo para ese "especial" que me encargaba Juan con el seguimiento día a día del rallye de 'su' piloto. Y todo ello, sin olvidar, naturalmente, todo el trabajo que el cargadisimo fin de semana traía consigo: la GP2 en Monza, la propia web del rallye, los varios clientes que competían en él ... ¡y los que estarían ese mismo sábado y domingo en la otra punta de la península disputando la Subida del Mármol! También es mala suerte (¡o mala planificación de quien confecciona los calendarios!) que tras tres meses sin una subida del nacional de montaña, la siguiente vaya a disputarse justo en la misma fecha que un rallye del Campeonato de España lo que, por cierto, ya es la segunda vez que pasa este año ... ¡así se promociona la montaña, si señor!

Como los cuatro años anteriores 'mi' Príncipe, en lo que a ver algo de acción en directo se refiere, empieza y acaba el viernes. El resto del fin de semana toca pasarlo 'en la cueva' del Auditorio actualizando la web del rallye tras cada tramo, así que la jornada previa del rallye, de la que suelo preocuparme bastante menos en el resto de pruebas del campeonato, se convierte en un día que hay que aprovechar al máximo. Por ello, antes de las 9 de la mañana del viernes ya me encuentro con Jose (que sería un año más uno de mis 'pares de ojos' en los tramos y cuyas magníficas fotos ilustran este reportaje) en el parque de asistencia de la Pola y empezamos a 'pasar revista' a los diferentes equipos. De inmediato, nos llama la atención el montaje del equipo oficial Peugeot, que contrasta con el mucho más modesto de los italianos de Twister Corse que traían el otro 207 S2000 presente. En el presumible duelo Ojeda-Solá, el primer asalto, el de la imagen y los medios, ya lo ganaba, por goleada, el equipo oficial para el que pilota el cántabro.

Luego de sacar unas cuantas fotos llegaba el momento de ir ya hacía la salida de Muncó para la única 'acción' que iba a tener ocasión de presenciar en directo durante todo el fin de semana. Como, además, había que pasarse también por la asistencia no nos podíamos 'meter' muy dentro del tramo con lo que poco se podía ver, aunque lo poco que veía casi que me bastaba para hacerme una primera idea que iba a revelarse más que acertada: el 207 S2000 oficial y Ojeda me causaban una sensación muy favorable y las tres o cuatro pasadas que le vi dar me corroboraban algo que sospechaba: que el nivel de un coche y un piloto que están liderando el IRC y haciendo cantidad de kilómetros sobre todo tipo de superficies, tiene que ser, por fuerza, superior. Quedaba por ver si eso se reflejaba luego en carrera, si Solá, con el 207 S2000 privado que casi descubría en las rampas de Muncó tras unos tests días antes en el oriente asturiano, podía estar a su altura pese a la menor experiencia con el coche ... y si los S2000 'nacionales' de Fuster y los dos 'Hevias' iban a estar al 'ritmo IRC' que, me temía, Ojeda iba a imprimir al rallye.

Tras hora y pico de shakedown que pasó volando, la tarde del viernes se fue en un suspiro con todo el ajetreo de ir y venir entre la zona de asistencia (donde la principal novedad era negativa, ¡a Sergio Fombona se le había roto el cambio de su EVO9!), el auditorio y el palacio de deportes de Oviedo para las verificaciones. Llegaba ya el momento del inicio de la ceremonia de salida cuando empezaba a oscurecer sobre Oviedo y la última imagen de 'mi día de rallye' era ver el precioso Porsche de los Vallejo incorporarse al tráfico de la capital entre una salva de aplausos ¡a la gente le gustan los GT sin duda!

El sábado tocaba 'madrugón de rallye' aunque esta vez sin el aliciente de ir a buscar una buena curva en el primer tramo del día. El destino era 'la cueva' del Auditorio donde ya estaban Maica y todo su equipo de la oficina de prensa del rallye con el que íbamos a compartir otro Príncipe más, el cuarto consecutivo. La simpatía y el buen hacer de todos ellos harían mucho más llevadero y fácil el trabajo ...y además este año teníamos nevera con 'aguas' y 'cocacolas' ¡esta vez íbamos a pasar el mismo calor de siempre pero con menos sed!

Tras despedir a otro de mis 'pares de ojos' en el rallye, mi novia Fernanda, a la que volvía a 'liar' un año para que hiciese de reportera gráfica en los reagrupamientos y asistencias, ya tocaba sentarse delante del portatil y empezar a ver los primeros tiempos en la pantalla de datos. Si algo bueno tiene pasarse el rallye entero en la sala de prensa es que te enteras de inmediato de lo que pasa ... lo malo para estas crónicas que me gusta hacer últimamente, y que suelo basar en mis 'sensaciones de cuneta', es que de esas no iba a tener ninguna, así que el relato del rallye tiene que ser esta vez, y por fuerza, bastante más convencional.

Y el relato tiene que empezar por los cronos de la especial inicial, primera pasada por el novedoso Muncó-Muñó, poco más que un aperitivo, con sus apenas 8 kilómetros, de todo lo que vendría después. ¿Quien iba a sospechar que este iba a ser, casi, casi, el último tramo del rallye en lo que respecta a la lucha por la victoria? Los tiempos que iban saliendo por la pantalla confirmaban poco menos que al 100% las previsiones de la víspera: scratch para el Peugeot oficial de Ojeda y segunda plaza para el privado de Solá, a poco más de un segundo.
Las 'estrellas invitadas' empezaban fuerte y sólo Berti, corriendo poco menos que en el pasillo de su casa, quedaba cerca de ellos, supliendo con manos las más que evidentes carencias del Polo 'africano' frente a los S2000 franceses. Sus 'primos' italianos, en cambio, cedían algo más de la cuenta, dejándose Fuster 5 segundos y 'Marce' 10, mientras que el mejor Mitsubishi era el del gallego Senra, a 12.8 y con Sergio Fombona sólo a 5 décimas y con ganas de demostrar que no se le había olvidado esto de pilotar pese a llevar casi un año sin hacerlo.
A continuación, Sergio Pérez encabezaba el trio de S1600, tras ser cinco segundos más rápido que Burkart, y con Márquez pegado al 'mundialista' alemán. Entre el Clio y el C2 quedaba intercalado el tercer 'Mitsu' en discordia, el de Lemes, y con todo esto ya nos podíamos empezar a hacer una primera composición de lugar y que Alfredo fuese ya elaborando el texto del primer comunicado para la web del rallye ... ¡si no fuese porque todavía faltaba Vallejo!
La combinación entre el reglamento FIA que se aplicaba al ser el rallye 'europeo' y la normativa técnica de 'nuestros' GT, que los condenaba al rallye autonómico, implicaba casi una hora de espera antes de 'cerrar' cada tramo y saber, de verdad, como iba la clasificación que nos interesaba, la del Campeonato de España. Finalmente el crono del coche número 201 aparecía en pantalla ¡y era muy bueno! El Porsche se metía justo delante de Berti y detrás de los 'chicos del IRC'. Como aperitivo, Muncó-Muñó no había estado nada mal, ahora llegaba la primera pasada por Pajomal ¡y entonces si que se podía decir que el rallye iba a empezar de verdad!

Lo malo es que empezaba ...¡y se acababa! Y digo que se acababa porque antes siquiera de llegar al punto de cronometraje intermedio, la radio daba la primera mala noticia: ¡accidente de Fuster! ... y casi sin tiempo para comentar que a mitad de tramo Ojeda ya 'le metía' 4 a Solá, aunque a ambos les batía 'Marce', al que le tocaba ahora el turno de 'correr en casa', llegaba la segunda: ¡Solá ha arrancado una rueda! De una tacada se 'caían' dos de los cinco S2000 ... y no por falta de fiabilidad, su teórico talón de Aquiles.

A final de tramo Ojeda marcaba su segundo scratch del día, sólo Marcelino Hevia le podía seguir el ritmo aunque acababa cediendo dos segundos y medio ... y el resto ya perdía 'un mundo', con Vallejo y Berti dejándose medio minuto, Senra (de nuevo el mejor Mitsu) casi uno tras haberse pasado en un cruce, y los demás de uno y cuarto en adelante. ¡Que barbaridad!
Pajomal, sucio, roto, con algo de niebla, dictaba sentencia y la lista de condenados era larga: Fuster se había dado un golpe 'serio', como luego podríamos apreciar a traves de unas fotos que se publicaban en el foro de los rallyes asturianos "RallyAst"; Solá se había dejado la rueda trasera izquierda y llegaba 'cojo' a meta con media hora de retraso, "En unas curvas lentas izquierda-derecha, a la salida me deslumbró el sol y no pude ver el bordillo, pegué un golpe y me dejé la rueda", era su relato de lo ocurrido; Burkart acababa con su C2 'en el campo'; Fombona pinchaba y tenía que hacer 12 kilómetros prácticamente en llanta; Meira llegaba un cuarto de hora después de lo previsto tras tener que parar a recolocar la batería que se había soltado y producido un cortocircuito; Garre empleaba más de una hora en un tramo que tenía que haberle llevado ventipocos minutos ¡Que debacle!

Tras el reagrupamiento de Nava, en el que como luego vería en las fotos que traería Fernanda a mediodía, la bruma era todavía intensa, el rallye iniciaba la segunda sección y lo hacía con una sensación rara para los que lo estábamos siguiendo delante del ordenador, en una sala de prensa prácticamente vacía y en la que sólo nos acompañaba un miembro del equipo de Vallejo que informaba puntualmente a su piloto de los tiempos de unos y otros. Mi balance era pesimista 'nos hemos quedado sin rallye' y las sensaciones que me hacía llegar Jose por teléfono desde la cuneta de Pajomal no hacían sino corroborarlo 'Ojeda impresionante, lo veo muy superior'.

Una superioridad que se confirmaba con otros tres scratchs para el 207 del cántabro en los tres siguientes tramos y que le permitían llegar al reagrupamiento de Villaviciosa, ya bajo un sol de justicia que acompañaría al rallye durante todo el fin de semana, con medio minuto de ventaja sobre el Punto de Marcelino, casi 50 segundos sobre el Polo de 'Berti' y más de un minuto sobre el Porsche de Vallejo. ¡Y estos eran los que estaban, relativamente, cerca!
El siguiente ya era Lemes ¡a más de tres minutos! encabezando un grupo (¡curiosamenbte todos 'clientes' nuestros) que iba a ser el que nos mantuviera más entretenidos el resto del día y en el que estaban, agrupados en apenas 25 segundos, los S1600 de Sergio Pérez y Carlos Márquez en animada batalla, y el EVO de Fombona, que había vuelto a perder tiempo en Pajomal, esta vez tras hacer un trompo.
Pese a todo, Sergio se mostraba optimista sobre sus posibilidades cuando me llamaba para preguntar tiempos y diferencias ... mientras su 'sponsor' y amigo Juan, desde Ibiza, era ya todo un manojo de nervios luego de los 'sustos' de por la mañana; "No te preocupes", le decía en una de las muchas conversaciones telefónicas que tuvimos a lo largo del día, "todo lo malo que le podía pasar ya le pasó entre lo de ayer del shakedown y esto de hoy", algo en lo que no estaba del todo acertado, pero que servía para tanquilizar a Juan, que seguía 'viviendo' el rallye vía internet y móvil desde la isla Blanca con la misma intensidad que si estuviese en una cuneta de esa Asturias que lleva tan dentro ... ¡y más en el Día de la Santina! De mejor ánimo notaba a María, la hermana de Carlos, cuando llamaba para que le confirmásemos algunos cronos: 'Carlos está contento, está corriendo y bien', me decía, y los tiempos le daban la razón ... casí diría incluso que Carlos estaba corriendo más de lo esperado, teniendo en cuenta su idea de salir sobre todo a acabar y sentenciar el regional ... y a que no había recibido todos los neumáticos que había encargado para el rallye con lo que, pronto, iba a andar corto de ruedas 'buenas'.

Los tramos de la tarde fueron pasando en un suspiro entre ir actualizando la web del rallye con las noticias de cada especial (¡y ya con las fotos del día que me habían llevado Jose y Fernanda!), ir echando un ojo a los tiempos on-line de Macael, e ir ayudando a Gerald vía Messenger con los comunicados de la GP2. La mayor novedad fue el scratch de Berti en el último Cesa-Valdebárcena, único que dejó escapar Ojeda, quien respondió 'enfadándose' en el que cerraba la etapa, segunda pasada por Piedrafita-Anayo, bajando su anterior crono en 14 segundos y metiéndoles otra buena 'tacada' a todos ... ¡encima de la ventaja que llevaba todavía tenía margen para correr más si hacía falta!

El domingo el planteamiento era similar al del sábado: 'megamadrugón' y 'a la cueva' otra vez. A la puerta del Auditorio me dejaba Fernanda mientras ella se dirigía a la Pola, combatiendo el sueño con la ilusión de subir en helicóptero para hacer unas fotos aéreas del tramo de Morcín. Algo que me había ofrecido Julian el viernes y que yo había declinado por 'miedica' (¡tengo bastante 'respeto a las alturas') pero a lo que mi novia se había ofrecido voluntaria encantada (¡para que luego digan que las mujeres no son valientes!). Aunque la niebla de la mañana les impedía despegar a la hora prevista, llegando al tramo cuando ya salían los 'autonómicos' con el Porsche de Vallejo a la cabeza, todavía le daba tiempo a sacar alguna bonita imagen que utilizaríamos después en la web del rallye.

A pie de cuneta estaba Jose que nos insistía vía telefónica en lo ya comentado el día anterior: 'Ojeda va muy fuerte, se nota mucha diferencia con los demás'. Una diferencia que se reflejaba en los cronos, con otro scratch para el cántabro (¡ya iban 9 de 10!), al que esta vez secundaban Vallejo ... ¡y Fombona! Sergio lo tenía claro cuando hablábamos la noche anterior con el fin de recoger sus impresiones del día para el 'especial': "Hoy por la tarde el coche no corría tanto como por la mañana pero Cholo lo ha estado revisando en la última asistencia y ahora creo que ya va perfecto otra vez ... ¡Mañana hay que ir a por Lemes!" Y a por él iba Sergio, superando ya, de paso, a Sergio Pérez. Al poco de aparecer el tiempazo de Sergio en la pantalla, llegaba un mensaje al móvil: era Juan y el texto lo decía todo sobre como seguía viviendo el rallye desde 1000 kilómetros de distancia: 'Empezamos bien ¡Quien dijo miedo!'

Pero miedo y algo más es lo que pasaba Fombona en el siguiente tramo, su favorito de siempre 'Santa Bárbara', que er el segundo del día y que, como en la jornada anterior, era el más 'dañino' para los que iban bien clasificados. Sergio llegaba a final de tramo temiendo haber roto el motor ... pero al menos llegaba, porque Lemes se quedaba en el camino con el cambio bloqueado en cuarta y teniendo que rendirse finalmente tras quemar el embrague en sus desesperados intentos por seguir en tan precarias condiciones. Un desenlace injusto para un rallye magnífico del piloto canario, que había rodado tan rápido como el sabe y encima sin cometer ninguno de esos 'excesos' que venían costándole siempre algún puesto en cada rallye, resistiendo además bien la presión que le metía la remontada de Fombona. Decididamente, Yeray es todo un diamante en bruto y ya tenemos ganas de verlo en Llanes al volante del C2 S1600 de Auto Laca ... ¡aunque por otra parte no deje de ser una lástima que no siga dando el espectáculo que venía dando al volante del EVO!

También sufría, y mucho, Carlos Márquez, que empezaba a oir ruidos más que sospechosos procedentes de la transmisión de su Punto S1600. Quedaban todavía un montón de kilómetros y al de Fios se le complicaba un rallye que llevaba muy bien. Definitivamente ahora si que había que olvidarse de correr ... ¡tocaba acabar como fuese! Algo que Carlos conseguría dejando poco menos que sentenciado a su favor un regional que viene buscando desde hace un par de años y que, esta vez, no se le va a escapar.

La exigente bajada hacía pasar malos ratos a Berti y Sergio Pérez, ambos con problemas de frenos, mientras que el que no tenía problema alguno era Ojeda, de nuevo el más rápido y acumulando ya más de un minuto de ventaja sobre Marcelino Hevia. Para el del Fiat era el último tramo antes del reagrupamiento con desayuno incluido en las instalaciones de "Roxu". Marce estaba haciendo un muy buen rallye, y el scratch era un premio extra mientras se encaminaba hacia ese resultado que venía esperando, y mereciendo, desde que, prácticamente, se bajó de la cama del hospital para subirse al coche en el Rías. Pero este deporte que nos apasiona es tan bello como, a veces, terríblemente cruel y todas las ilusiones del de Barredos, que acababa de declarar en directo a la tele que ya iba "Tranquilín" pensando sólo en acabar, se desvanecían al poco de empezar la segunda pasada por La Nueva-La Invernal. Cuando Alfredo, a mi lado en la sala de prensa recogiendo las declaraciones de los pilotos durante todo el rallye por la radio, me anunciaba 'Acaban de decir que Marcelino está fuera' simplemente no me lo quería creer. Pero, por desgracia, era verdad. Se había roto la bomba de la servodirección y todo el mecanismo perdía su funcionalidad de un modo tal que hacía poco menos que un suicidio intentar completar los cerca de 18 kilómetros que quedaban hasta final de tramo. No había nada que hacer, y uno no quería ni imaginarse el disgusto por el que Marce, Guti y todo su equipo estarían pasando ... si, ya se que 'así son las carreras' pero no por ello, a veces, lo que son es demasiado injustas.

El abandono del Grande Punto que quedaba en carrera se producía con el reloj a punto de marcar las dos de la tarde. Tenía el tiempo justo para 'colgar' en la web el comunicado sobre el tramo y salir disparado hacia el Auditorio para ver la salida de la fórmula 1. Tras comprobar como Alonso convertía, sin problemas, su magnífica pole del sábado en un sólido liderato, y como Hamilton, decididamente, no se corta ente nada ni ante nadie, tocaba volver a la sala de prensa para rematar el trabajo. El último tramo ya no producía ningún otro sobresalto, Berti se hacía con el tercer scratch que 'dejaba' Ojeda, este ganaba con autoridad y Vallejo, tercero y todo el rallye a su ritmo y, supongo, que con el alma en vilo por si en el buen rato que transcurría entre el paso de los primeros y el suyo ocurría cualquier circustancia negativa que pudiese llevar a una neutralización, se hacía con el liderato del nacional. Si antes de empezar la temporada y, sobre todo, tras lo visto en Villajoyosa, me dicen que a dos rallyes del final el del Porsche iba a llegar como líder, dos puntos por delante de Fuster y Berti empatados a puntos, simplemente no me lo hubiese creido ni de causalidad. El campeonato era, tenía que ser, poco menos que un paseo para Fuster y el Fiat "oficial". Ahora, con el Llanes a dos semanas vista, un Grande Punto destrozado y un Costa Brava cerrando el año en el que el Porsche va a volar las cosas no están, ni mucho menos claras ¡Quien lo iba a decir!

Cuarto acababa Fombona, tras superar el susto de los fallos de motor en Santa Barbara que, al final, no eran tan graves como para evitarle seguir hasta meta y acabar por delante de un Sergio Pérez que cada día me 'engancha' más, tanto por su forma de llevar el Clio S1600 (¡vaya cruzadas que se marcó para la cámara de Jose!) como, sobre todo, por como vive cada rallye, disfrutando de principio a fin y siempre con la sonrisa en el rostro. Tras él, terminando sexto, Carlos llegaba al Bombé 'de milagro' con un coche cuya caja de cambios amenazaba con decir basta en cualquier momento ... aunque resistía lo justo como para permitir completar el rallye.

Tras publicar el comunicado sobre el tramo final en la web tocaba comer algo a toda prisa y salir 'pitando' camino del Paseo del Bombé para recibir a los supervivientes, charlar con los 'mios' que llegaban a meta y sacar las fotos de la larga y, por momentos, interminable entrega de premios. Se acababa así el Príncipe del 'año 1 antes del IRC' ... ¡ya va quedando menos para que empiece la nueva era del 'Príncipe de los rallyes'!