Por segundo año consecutivo la coincidencia de fechas entre el rallye de Tineo y la subida a Ubrique nos llevaba a 1000 kilómetros de la clásica prueba de apertura del regional asturiano. Así que, sin haber estado a pie de cuneta en los tramos del occidente, pasando frio pero notando el calor que la afición le suele dar al Tineo, se me hace complicado tratar de contaros algo que no sepais de un rallye en el que, seguro, si que habeis estado en directo muchos de los que podais leer estas líneas. Y aunque, como suelo decir muchas veces cuando hablo con unos y otros de estas cosas, en un rallye, como mucho, ves "cuatro curvas" y con eso luego tratas de sacar conclusiones y escribir una crónica en la que, inevitáblemente, la imaginación acaba teniendo más espacio que la pura percepción directa de los hechos, si ni siquiera has visto esas "cuatro curvas" entonces la tarea se vuelve realmente complicada. Porque, al final, no es sólo el haberlos visto pasar lo que te hace tener unas sensaciones que sirven de base para "escribir una historia" a partir de ellas, es también el estar en contacto directo con el ambiente que se vive en esas largas esperas entre tramo y tramo lo que te da, muchas veces, ese punto de partida sobre el que construir el reportaje. Un punto de partida que luego se ve también complementado por el hecho de hablar con los equipos en las asistencias, de ver a los mecánicos trabajar o de, simplemente, observar la expresión de este o aquel piloto cuando se dirige al siguiente control horario. Así que, sin nada de eso a lo que agarrarme, me queda sólo el recurso de "leer los tiempos" para tratar de poner en palabras todo lo que fue este Tineo 2007 ...¡ya me direis los que allí estuvisteis si aquello fue así o no!

José Ramón Rodríguez ganaba sólo un tramo, el último, y ello le bastaba para llevarse el rallye in extremis	Jorge López luchó primero contra Félix y luego contra José Ramón para acabar siendo segundo	Márquez fue de menos a más con el Punto S1600 y por la tarde ya marcó su primer scratch

Y leyendo los tiempos, de entrada lo primero que salta a la vista es el ritmo que marcó Félix García ya desde primera hora de la mañana. Uno se acuerda de otros Tineos y del frio que precede habitualmente a ese primer tramo del día, un tramo que con las bajas temperaturas y las muy habituales humedades suele ser ya una trampa para más de uno. Atacar de salida es siempre una táctica tan arriesgada como efectiva si las cosas te salen bien. Así que el de Trevías debió tener claro que valía la pena el riesgo y el resultado fue un primer scratch conseguido con diferencias, cuando menos, interesantes. Sólo Jorge López y Julio César Castrillo cedían menos de diez segundos, mientras que otros dos de los más que probables ocupantes de las plazas de honor, José Ramón Rodríguez y Carlos Márquez, se dejaban ya unos cuantos más. En el caso del piloto del EVO5 eran una docena, que podían significar, simplemente, que José Ramón había optado por la táctica opuesta a Félix, es decir sopesando los riesgos que el primer tramo siempre conlleva y decidiendo que valía más esperar un poco antes de "sacar toda la artillería".
Carlos, por su parte, perdía casi medio minuto, aunque tampoco era algo que le preocupase en esos momentos. Lo suyo era "hacer kilómetros" tras el efímero debut de Vilajoyosa y es que, de hecho, este Sobrado-La Mortera era su primer tramo completo y sin problemas al volante del Punto S1600.
Entre los dos anteriores se metía uno de esos pilotos por los que creo que casi todos tenemos cierta debilidad: César Fernández "Santana". El del Clio representa a la perfección eso tan humano de sentir simpatía por el más débil, por el que lucha con armas más modestas, como buscando en su pelea una especie de espejo en el que mirarnos y que nos de ánimos y fuerzas para enfrentarnos a lo que sea ... aun sabiendo que lo más fácil es que salgamos perdiendo. Porque, por mucho que desde la cuneta te animen y por mucho que le eches valor, con un Clio no se puede ganar a los todopoderoros "Mitsus" de tracción total ... y "Santana" lo sabe, y la afición también ... pero uno y otros procuran olvidarlo porque creer en los milagros siempre reconforta y mientras la ilusión dura se disfruta más ¡claro que si!

Tras el fuerte ataque inicial de Félix, en Rindión era el turno de Jorge para imponer la lógica aplastante de la mayor competitivad de su afinadísimo EVO9. Tras él, Castrillo entonaba el "canto del cisne" de su tan espectacular como frágil Renault Maxi Megane, al que ya nadie vería pasar más el resto del día ¡lástima! Félix era tercero en el parcial y seguía como líder, José Ramón continuaba un "pelín" por debajo de los dos Mitsubishis de cabeza, "Santana" seguía luchando contra la lógica y Márquez ya se "arrimaba" un poco más y empezaba a pasárselo bien con su nuevo coche.

Las segundas pasadas por los dos mismos tramos ya disputados tenían un desarrollo similar a las primeras. De nuevo Félix era el más rápido en Sobrao-La Mortera, de nuevo Jorge le replicaba en Rindión. Y, al igual que en el primer bucle, el de Trevias era el que sacaba más partido al tramo en el que acababa por delante, con lo que la diferencia entre los dos aumentaba y, a mitad de rallye, el Mitsubishi EVO6 azul era líder con 12 segundos de ventaja sobre el EVO9 rojo. Tras ellos, José Ramón había ido aumentando el ritmo, habiéndose intercalado entre los dos primeros en ambos tramos y siendo,de hecho, el más rápido de todos en el cómputo de este segundo bucle. La lucha por la victoria no iba a ser sólo a dos bandas , había ya un tercero en discordia.

La pausa del mediodía servía también para hacer ya un primer "recuento de bajas". El rallye estaba siendo duro, muy duro, y de los más de 90 inscritos ya habían caido casi una treintena cuando todavía quedaba más de medio rallye. Había pues que reposar, reparar lo reparable, y empezar los tramos de la tarde con nuevos ánimos. Y si a alguien le sentaba bien esa pausa del mediodía era al Punto S1600 de Márquez. El de Fios y su equipo iban poniendo el coche a su gusto y los tiempos empezaban a salir. Carlos se hacía en Murias con su primer scratch y uno se lo imagina con una sonrisa de oreja a oreja al conocer su crono, ¡mucho ojo con Márquez a medida que avance la temporada al volante de este coche!
Sin embargo, la noticia de Murias no era el scratch de Márquez, era el error de Félix que le costaba, otra vez, perder el rallye de Tineo. El de Trevías pasaba demasiado rápido por el rasante de Bustellón ...¡y la carretera se le quedaba pequeña por unos centímetros! Con el coche colgando al borde de la calzada, seguro que los sentimientos para el piloto eran encontrados, por un lado la rabia de saber que el rallye se había escapado, por otro el alivio de no repetir un accidente como el de hace dos años. Porque al menos esta vez, y gracias a la ayuda de los aficionados que lo devolvían al tramo, Félix podía seguir adelante con más daños en el alma que en el cuerpo o la chapa.

Con Félix descartado para la victoria lo lógico era esperar que el liderato lo hubiese heredado Jorge ... pero eso era olvidar que quien "venía en vuelta rápida" desde hace ya un par de especiales era José Ramón. El del EVO V que todavía conserva los colores tan característicos de su anterior propietario era segundo y ello le bastaba para ponerse en cabeza por algo menos de dos segundos y, pese a no haber ganado todavía ningún tramo. Márquez era tercero pero a una distancia que no parecía posible recuperar en circustancias normales y cuarto venía un enrabietado "Santana", al que un pinchazo al final del segundo Rindión había hecho aun más imposible su ya desesperada misión de batirse con los EVOs.

Pero el del Clio suele aplicar ese refrán del país vecino que dice algo así como "imposible no es una palabra francesa", así que lejos de resignarse a una magnífica cuarta plaza, con liderato de grupo N incluido, César apelaba a la épica, superaba aun más si cabe esos límites por los que siempre anda paseando ...¡y se hacía con el scratch en Piedrafita-Rodical! El rallye lo ganaría otro, seguro, pero a la afición se la volvía a ganar "Santana".
Segundo en el tramo era, de nuevo, José Ramón, que extendía su liderato a cerca de 8 segundos sobre un Jorge al que tanto Márquez como Félix superaban también en esta especial. La conclusión que uno sacaba "leyendo los tiempos" en la sala de prensa de Ubrique, a 1000 kilómetros de Tineo, era, más o menos, alg así como "esto está decidido, gana José Ramón y Jorge se conforma con la segunda plaza".

Y, claro, era una conclusión precipitada que, a lo mejor, no hubiésemos sacado de haberlos visto pasar en directo. Porque Jorge no se iba conformando, ni mucho menos, y su tiempazo del segundo Murias era buena prueba de ello. Su scratch, con diez segundos de ventaja sobre José Ramón, le daba el liderato con casi tres segundos de ventaja y sólo un tramo por delante. El rallye no estaba, en absoluto, decidido.

Así se llegaba a un desenlace de esos que hacen afición y que nos hubiese gustado ver en directo. Restaban los 12900 metros de Piedrafita-Rodical, apenas trece kilómetros que iban a valer por todo el rally. José Ramón, con el número 1, se lanzaba a por todas y marcaba un 9:09 que significaba arañarle 11 segundos a su crono de la pasada anterior. Jorge tampoco "se guardaba nada" y rebajaba en 14 segundos su tiempo de referencia que era de 9:26 ... la cosa estaba justa, muy justa. Tan justa, de hecho, que José Ramón, ganando su único tramo del día, ¡se llevaba el rallye por una décima de segundo! Más apretado imposible, un auténtico final al sprint y con photo-finish que le daba la segunda victoria del año al de la Escudería Moscona luego de su triunfo hace quince días en el rallysprint del Viso.

El podio lo completaba un Márquez más que contento con el rallye realizado y con más ganas que nunca de que lleguen los próximos. Carlos está encantado con como va su nuevo coche y no se porque me da que este puede ser su año.

Cuarto terminaba el "heroe" de la afición, César Fernández "Santana" al que por un lado nos gustaría verle con una mecánica más competitiva (algo que, sin duda merece) pero que, por otro y siendo un poco egoistas, casi preferimos seguir viendo con su Clio haciendo de "matagigantes". Porque cualquier resultado que consiga así será como un acicate para todos nosotros, como un "no hay nada imposible", algo que todos sabemos que no es cierto pero en lo que nos gusta creer de vez en cuando.