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07|10|06 RALLYE VILLA DE LLANES| Cto. ESPAÑA de RALLYES| 9ªPRUEBA
Tres de tres para Solá en Asturias y título ya decidido en favor del piloto catalán de Citroen tras el tempranero abandono de su único rival para el título, el levantino Fuster. Un desenlace tras brusco como inesperado que resolvió por la vía rápida un campeonato que además de estar en crisis parece tener también hasta poca suerte.
CRONICA


Llanes es, cada año, una de esas citas esperadas dentro de la temporada nacional. Un rallye diferente, todavía con una personalidad propia dentro de la cada día mayor uniformidad que los reglamentos acaban por imponer a las pruebas del Campeonato de España.
Tal vez, incluso, ¿por qué no decirlo?, con sabor a "antiguo", sin mucha de toda esa parafernalia que cada día cobra más protagonismo y que, si bien es verdad que a los que vamos al rallye no sólo a disfrutar sino, también, a trabajar, nos facilita la labor, a veces acaba por convertirse en más importante que la propia competición.
Por eso a Llanes se le perdonan, diría que sin dudarlo, carencias en áreas que en otras pruebas se exigen como imprescindibles. Pero ya sabemos que "el Llanes es así" y si hay que montar las asistencias en medio de las casas del pueblo en vez de en un ultramoderno recinto ferial pues se hace y "aquí no pasa nada". Porque esto es Llanes y el entusiasmo de todo un pueblo detrás de su rallye se nos acaba por contagiar a todos. Y cada año, al terminar, pocos hay que se acuerden de las incomodidades, mientras que somos mayoría los que ya estamos deseando volver a disfrutar del rallye más atípico y, tal vez por eso, más "romántico" y con más "sabor" del campeonato de España.

Solá-Amigo y el equipo Citroen-AutoLaca celebrando la victoria y el título

Vallejo se la jugó en los tramos de la tarde pero Solá tenía el rallye controlado

Berti dio el máximo pero de nuevo tuvo que conformarse con la tercera plaza

Este año, las nuevas fechas del rallye, a mediados de Octubre, parecían ser garantía de mal tiempo para complicar más unos tramos que, ya en seco, son de los que todavía patinan. Pero como la lluvia suele ser invitada habitual en la prueba del oriente asturiano, se celebre esta antes, durante o después del verano, pues tampoco es que nadie se asustase ante las perspectivas de una rallye sobre piso mojado. Es más, ¡no faltaban quienes lo estaban deseando! Naturalmente todos sabreís quienes eran estos "masocas" ... ¡los pilotos de los Mitsus! Tras la demostración de Burgo y, en menor medida de Rantur en Ferrol (¡si menor se puede considerar acabar en el podio!), tanto los dos gallegos como el gijonés Sergio Fombona, que volvía a la carga en Llanes, eran de los que "bailaban la danza de la lluvia" en la tarde-noche del viernes.
Porque, contra todo pronóstico, el shakedown del viernes por la mañana se había disputado sobre suelo seco y hasta con sol por momentos. Pero, a medida que avanzaba el día las nubes se iban adueñando del panorama y la lluvia ya nos acompañaba en verificaciones y ceremonia de salida. El rallye, o al menos los primeros tramos, iban a ser sobre piso deslizante.

Y, en efecto, cuando nos pegábamos el habitual madrugón que requiere asistir al primer tramo del rallye, no sólo era todavía noche cerrada sino que llovía ¡y con ganas! Parapetados bajo el paraguas a la salida del primer cruce de Noriega esperábamos impacientes el paso de los primeros coches mientras iba amaneciendo pero no dejaba de llover. ¿Podrían los grupo N volver a dar la sorpresa? La sensación visual que nos dejaban al pasar unos y otros era que si. Sobre todo Burgo y Fombona parecían ser los más rápidos mientras que de los S1600 quien menos nos impresionaba era el C2 de Solá y quien más el Clio S1600 de Vallejo. Pero, como muchas veces ocurre, una cosa es la sensación visual que uno tiene de ver pasar a los coches por una de la multitud de curvas que tiene un tramo (y además, en este caso, por una no muy significativa a efectos de tiempos aunque atractiva para sacar fotos) y otra es la cruda realidad que marca el cronómetro. Y este nos demostraba que nuestras percepciones, esta vez, eran totalmente erróneas. Solá marcaba el mejor crono, seguido de los S1600 de Vallejo, Hevia y Fuster, mientras que el mejor grupo N, el EVO9 de Sergio Fombona, era quinto pero nada manos que a ¡25.7 segundos!

Si con todo lo que llovía los S1600 dominaban con esa claridad una cosa ya estaba clara: los grupo N no iban a ganar en Llanes. Y claro, una vez conocido el veredicto había que buscar la explicación. Y esta venía dada por una combinación de factores en la que intervenían, por un lado, unos tramos rápidos y muy distintos a los de Ferrol, en los que la capacidad de tracción de los 4x4 en sus numerosos cruces era clave, y por otro, unos S1600 muy bien calzados y reglados para agua tras lo mucho que habían sufrido en el rallye anterior sobre pisos deslizantes.

Con la primera incógnita del rallye despejada, la atención se centraba en la lucha que debía oponer a Solá y Fuster en pos del campeonato de España y en la que Vallejo y Berti Hevia podían ser jueces y tener también mucho que decir. Pero no había tiempo casi ni para hacer apuestas, el Clio de Fuster acusaba graves fallos eléctricos en la segunda especial, Nueva-Labra, y el alicantino veía impotente como se le iban casi cuatro minutos y como, además, no podía siquiera tratar de continuar. Con Fuster fuera y Solá de líder, el campeonato quedaba, de golpe, totalmente en manos del catalán que de mantener la primera posición sentenciaría ya el título a su favor.

Marcando su tercer scratch consecutivo tras ganar también la segunda pasada de Siejo-Puertas, Dani tomaba ventaja a la vez que conocía el abandono de su único rival. En Citroen se había afrontado Llanes con cierta prevención tras los problemas de comportamiento sobre suelo deslizante sufridos en Ferrol, pero el trabajo previo al rallye había dado sus frutos y, además, la suerte, o mejor dicho la mala suerte de Fuster, convertían de pronto una prueba en la que salir, tal vez, a la defensiva, no era mala opción pensando en resolver luego en casa, en el rallye donde se podía ganar ya el campeonato sin tener que esperar ni un día más.

La segunda sección terminaba con una nueva pasada por Nueva-Labra en la que Berti Hevia se hacía con el primer scratch que se le escapaba a Solá. Un nuevo scratch del piloto oficial de Peugeot en Siejo-Colombres cerraba la primera mitad del rallye con la situación muy definida: Solá era claro líder, y a algo más de veinte segundos Vallejo y Hevia se disputaban la segunda plaza. El resto ya estaban muy lejos, encabezados por Burgo con el primer grupo N, luego de que Fombona tocase una rueda en Siejo-Puertas cuando lideraba la categoría y se quedase sin frenos, perdiendo un tiempo que sería decisivo en sus aspiraciones.

La lluvia que había endurecido tremendamente los tramos de la mañana, cesaba camino de la larga pausa del mediodía por lo que los tramos de la tarde abrían nuevas incógnitas. Si hasta entonces estaba claro que tipo de gomas montar ahora ya no lo iba a estar tanto y habría que pensar muy mucho si jugársela ya con slicks, más o menos rallados, o ir a montas más seguras pensando en las numerosas humedades que todavía tenía que haber en las carreteras.

Según decían los que ya estaban apostados en los diferentes sectores de los tramos que quedaban por disputar, el largo y siempre complicado Carmen-Torre presentaba humedades en la subida pero tenía la bajada casi totalmente seca, mientras que en el "escondido" La Tornería la situación era prácticamente la opuesta, con la zona de descenso siendo la que presentaba más agua. Así las cosas, la situación en la clasificación de unos y otros dictaba más que nada la elección de neumáticos. El líder, Solá, pensaba en mantener su liderato, y el segundo, Vallejo, pensaba en atacar y ganar el rallye. El de Meira apostaba por la lluvia que es donde mejor se desenvuelve y optaba por unas gomas más ralladas que le perjudicaban en la Tornería, donde cedía casi nueve segundos, y le beneficiaban en Carmen-Torre, donde apenas si recuperaba unas décimas más de los perdido en el tramo anterior. Poco menos que "match nulo" y dos tramos menos por disputar, el rallye y el campeonato estaban cada vez más en las manos de Dani Solá.

La primera pasada por la Tornería suponía el final del rallye para Marcelino Hevia. El de Fiat no había tenido su día, con un pinchazo nada más empezar que le había dejado ya muy retrasado, llegando a mitad de rallye en tierra de nadie, noveno detrás de los primeros grupo N y delante de los mejores C2 del trofeo. Pero lo peor estaba por llegar para Marce que tocaba en un interior, arrancaba una rueda y quedaba atravesado en medio de la carretera, obstaculizando el paso y obligando a la neutralización de la especial.

La segunda pasada por La Tornería se celebraba ya sin incidentes entre los de cabeza pero con la noche empezando a caer. Entre que los horarios estaban diseñados para 90 coches y ya sólo quedaban poco más de treinta, la neutralización y la ausencia de reagrupamiento en la parte final, las salidas se daban cada tres minutos y el ritmo del rallye bajaba y se hacía ciertamente cansino. Como además Solá tenía la situación muy controlada, los dos últimos scratch de Vallejo sólo servían al gallego para afianzarse en la segunda plaza y quedarse, una vez más, a las puertas de ese triunfo en una prueba del nacional que no acaba de llegar. Tras él, Berti Hevia se tenía que conformar con ser el más aplaudido desde las cunetas por su entrega pero sin poder llevar al 206S1600 más allá de la tercera plaza en lo que parece es ya el techo de un modelo que está desde hace tiempo en la recta final de su carrera.

De vuelta a Llanes para la entrega de premios final, el cansancio era patente en las caras de unos y otros. El rallye había sido largo y duro y, por la tarde, quien más quien menos ya había pensado sobre todo en terminar, algo que tal y como estaban las carreteras tampoco es que fuese fácil precisamente. Las mayores emociones de la segunda mitad del rallye las deparaban "las copas" con el espectacular desenlaces del Volante RACC Asturias como última guinda a un Llanes más, el treinta, que tenía su broche en la nueva ubicación de la ceremonia de entrega de premios, junto a la playa del Sablón. Allí veíamos a un Solá ya campeón de España que, nos daba la impresión, parecía casi más aliviado que contento. Este campeonato se lo habíamos adjudicado todos al piloto catalán antes de empezar, iba a ganar poco que menos que "sin bajarse del autobús" como decía el legendario entrenador del Barça de los años 60, Helenio Herrera. Y al final lo ha ganado si, incluso con un rallye de adelanto ... ¡pero de fácil no ha tenido nada!

GRUPO N y EVO CUP

Pedro Burgo está en racha y todavía puede ganar el nacional de Grupo N

Como ya se comenta al principio de la crónica general, los grupo N no pudieron esta vez ser tan protagonistas como en Ferrol pese a la fuerte lluvia caída por la mañana. La primera especial bastó para ver que la victoria estaba, de nuevo, fuera del alcance de los Mitsus pese a las ganas que Fombona le ponía en los primeros tramos, siendo el que menos cedía respecto a los S1600 punteros. Ganas que le costaban a Sergio meter una rueda en una acequía camino de Puertas, rompiendo de paso un latiguillo de frenos y teniendo que hacerse lo que quedaba de tramo en el filo de la navaja, sin poder apenas parar esa mole que es un EVO9 a toda velocidad. Ahí perdía el gijonés toda opción a sumar su tercera victoria con el coche de RMC ya que la posterior reparación le costaba otros veinte segundos a los cuarenta que se había dejado en el tramo y con ello tanto Burgo como "Rantur" le superaban de forma irremediable, dejándole la tercera plaza como máximo premio posible.
También le pasaba Coldecarrera pero el catalán sufría un pinchazo en Nueva-Labra que fastidiaba su excelente retorno al nacional un año después de ganar el campeonato de grupo N. Cuatro minutos se dejaba David en el cambio de la rueda con lo que, definitivamente, serían los gallegos quienes se disputarían la victoria.
Y entre ellos, la ventaja todo el día era para un Burgo motivadísimo tras su éxito de Ferrol aunque un tanto nervioso durante toda la jornada, como alguna que otra manifestación un tanto subida de tono hecha a la radio permitía constatar. El ferrolano no estaba nada satisfecho con el orden de salida y el hecho de que, saliendo a tres minutos, hubiese más de diez entre Rantur y él a la hora de afrontar los tramos de la tarde-noche, con la posible diferencia de visibilidad que ello podía conllevar. En todo caso, los cronos no parecían demostras que hubiese grandes prejuicios para Pedro, que sumaba una nueva victoria. Una victoria que le acerca peligrosamente a "Rantur" tanto en el nacional de grupo N como en la EVO CUP, certámenes ambos que se decidirán en el Costa Brava.

TROFEO C2 CITROEN

Soberbio rallye de Alejandro Rodríguez que ya es líder de la general del Trofeo C2

Si este rallye tenía un favorito en el Trofeo C2 ese era, sin duda, Carlos Márquez. Y si había un piloto que le pudiese inquietar o, incluso batir, ese era el otro asturiano de la copa de Citroen, el candasín Alejandro Rodríguez.
Alejandro era el que daba primero, marcando el scratch en la primera especial, con Márquez segundo a menos de siete segundos y dispuesto a todo en Nueva-Labra. Pero precisamente en ese tramo se quebraban las posibilidades de victoria del piloto de Fios cuando notaba como su motor empezaba a no ir nada fino mientras que Alejandro hacía un auténtico tiempazo (¡nada menos que décimo scratch con casi todos los "gordos" todavía en carrera!) y tomaba una ventaja que sería insalvable. Además, el líder del campeonato, el gallego Fernando Rico, se "comía" una frenada y acababa con su C2 en el río y viendo como su ventaja al frente de la tabla se iba a esfumar si los dos asturianos acababan en cabeza.
Y, por desgracia para el ferrolano y para alegría de la afición local, así era. Alejandro no daba opción, no cometía el más mínimo error y completaba un rallye simplemente colosal, ganando entre los C2 y metiéndose nada menos que octavo de la general scratch. Y no menos soberbio era el rallye de Márquez, que con un motor "moribundo", acababa segundo del Trofeo y décimo scratch, superando ambos al C2 Super1600 de AutoGomas pilotado por César González Raba.
Ya sin poder inquietar a los dos asturianos que estaban, simplemente, a otro nivel, la tercera plaza era para el gallego Oscar Garre tras cerrada pugna con el también gallego Roberto Méndez y el cántabro Dani Peña.

VOLANTE RACC ASTURIAS

Victoria y título para Sergio González ¡en el último tramo!

El Desafio regional nos deparó el rallye más igualado y emocionante del año, decidiéndose el nombre del ganador en la última especial, a la que llegaron cuatro pilotos todavía con posibilidades. A los habituales dominadores de este año, Sergio González y Francisco Cima, se unieron en Llanes los locales Freddy Tames y Luis Arenas, haciendo todos ellos un rallye fantástico.
De entrada fue Tames quien tomó la batuta, llegando a mitad de rallye con algo más de veinte segundos de ventaja sobre Sergio y con Cima y Arenas apenas unos segundos más atrás.
Por la tarde, tras la temprana neutralización de Carmen-Torre, sólo quedaban tres tramos para decidir la prueba, y de ellos dos eran pasadas por el largo y complicado Carmen-Torre. En la primera Sergio González y Cima hacían cronos casi calcados, mientras que Tames cedía de golpe toda su ventaja, perdiendo el liderato del rallye por apenas tres segundos, para volverlo a recuperar de inmediato en La Tornería.
Así se llegaba a la pasada definitiva por Carmen-Torre con Tames primero, Cima segundo a diez segundos, Sergio tercero a quince y Arenas cuarto a ventidos con lo que cualquier cosa podía pasar. Y lo que pasaba es que Sergio González hacía un tiempazo, aventajando en diez segundos a Cima y más de veinte a Tames con lo que el de la Escudería Lugones le daba la vuelta de forma espectacular a la clasificación general, ganando el rallye por delante de Cima, con el llanisco Freddy Tames tercero. Un triunfo que le da, además, ya matemáticamente el campeonato a Sergio González por un margen mínimo de dos puntos sobre Francisco Cima que, si gana en Grado empatará el total de su rival pero no podrá ya superarle debido a su menor número de victorias. Eso si, a Cima le quedaría todavía una remota posibilidad que pasaría por meterse entre los diez primeros al scratch y sumar por ello los puntos extra previstos para ese caso, algo difícil sin duda.