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Campeonato de España de Rallyes 2004 - 7 ª Prueba - Rallye PRÍNCIPE DE ASTURIAS

Las largas vacaciones de verano del nacional de rallyes se acabaron con la llegada de septiembre y la disputa de la 41ª edición del Rallye Príncipe de Asturias. Los dos meses pasados desde el accidentadísimo Avilés sirvieron para que los equipos punteros se preaprasen a fondo con el fin de encarar una recta final del campeonato que, a la vista de como llegaba la clasificación y de lo que quedaba por venir, podía resultar un paseo triunfal para Alberto Hevia y Renault. Con más de un rallye de ventaja a efectos de puntuación y dos pruebas más en Asturias, luego de su triunfo en Avilés, Berti era el favorito número 1 en todas las quinielas y pronto se encargó de demostrar que apostar por él, era, efectivamente, la opción más segura.

Al igual que en todos los anteriores rallyes de la temporada, el duelo por la victoria se planteó, ya desde la primera especial, entre Hevia y los Peugeot de Vinyes y Ojeda. Un duelo en el que nadie se podía inmiscuir ni siquiera pese a que las condiciones de los primeros tramos, con abundancia de zonas húmedas, pudiesen ser más propicias para las sorpresas. Hevia marcaba los dos primeros scratchs, en ambos casos secundado por el Peugeot de Vinyes, y encaraba la primera pasada por el siempre complicado Libardón ya con una interesante ventaja sobre el andorrano y sus dos compañeros de equipo, Ojeda y De Miguel, que ocupaban las dos siguientes plazas de la general.

Vallejo, siempre rápido cuando el piso está delicado, se había descolgado ya por una inadecuada elección de neumáticos. El gallego optó por montar mixtos atrás y el resultado fue un trompo en La Rasa y mucho tiempo perdido cuando el rallye apenas había hecho que empezar. Los Citroen tampoco podían seguir el ritmo, pese a un buen crono de Sordo en la primera especial que no tendría continuidad ya que Dani sería una de las víctimas de un Libardón, con abundancia de humedades, en el que se quedaban también las aspiraciones de De Miguel y del canario Víctor Delgado. El accidente de este último obligaba a neutralizar la especial, que era para Vinyes, aprovechando un ligero error de Hevia en una de la numerosas curvas del retorcido trazado.

Berti y Pin ganadores y casi campeones

Ojeda dio el máximo el domingo tras los problemas del sábado

Vallejo sigue sumando podios a base de regularidad y oficio


Tras el reagrupamiento de Villaviciosa, y con el tiempo mejorando y desapareciendo la amenaza de lluvia, las tres especiales del segundo bucle eran todas para Hevia. El polese partía al ataque y su ventaja crecía tras cada tramo. Además, los Peugeot empezabana a experimentar problemas con la presión de gasolina. El primer afectado era Ojeda, que penalizaba un minuto tras perder mucho tiempo en el refuelling al inundarse de combustible el interior de su 206. Además, los vapores del combustible que habían quedado en el habitáculo, hacían que el sigueinte tramo fuese un calvario para Enrique y Raquel, que cedían ya mucho tiempo y todas sus opciones de victoria. Las esperanzas de Peugeot se centraban en Vinyes, que era el único que le seguía de cerca, pero el andorrana empezaba a experimentar problemas similares a los de su compañero en la segunda pasada por Libardón, tramo que sería el último que completase ya que no podía siquiera tomar la salida del siguiente.

Los dos últimos tramos de la larga y difícil primera jornada del rallye eran también para Hevia. Entre sus buenos cronos y el abandono de Vinyes, el poleso se encontraba ya con una más que confortable ventaja de dos minutos sobre un Fúster que, más que pensar en acosar al asturiano, tenía bastante con contener los ataques de un espectacular Manolo Cabo de los anteriormente retrasados Vallejo y Ojeda que venían en plena remontada. La mala suerte apartaba al Saxo del cántabro, víctima de un pinchazo en el ques e dejaba varios minutos y que aconsejaba a su equipo a hacerle abandonar para no forzar innecesariamente una mecánica que a estas alturas del año está ya bastante castigada luego de la larga camapaña nacional/regional cántabro que lleva el piloto de Auto Gomas.

Si la primera etapa dejaba ya el rallye casi visto para sentencia en lo que respecta a la primera plaza, no por ello faltaban focos de interés para la jornada del domingo. La lucha por el segundo puesto se anunciaba cerrada, con Fuster por delante pero Vallejo y Ojeda rodando regularmente más rápido que el C2 oficial. Tras ellos, un Concepción en tierra de nadie con el C2 "belga" y justo tras el palmero otra lucha que estaba levantando pasiones. La primacia del grupo N se disputaba segundo a segundo entre el gallego Burgo y el asturiano Fombona, con mínima ventaja al final del día para el primero pero con el gijonés dispuesto a todo el domingo, sobre todo si la lluvia hacía acto de aparición.

Importante victoria en Grupo N para Burgo que toma ventaja en el campeonato

Vallín volvió a ser imbatible en casa para los Desafiantes

Dos de dos en el Trofeo C2 para el gallego Fernando Rico


Y el agua llegaba, pero por la noche, dejando bastante mojadas algunas zonas a primera hora del domingo pero no volviendo a asomarse en lo que quedaba del día, con el sol acabando por adueñarse del cielo asturiano.

Hevia tenía claro que no necesitaba arriesgar pero aun así, ganaba el primer tramo casi sin querer y se quedaba además sin su "menos lejano" seguidor. Fúster arrancaba una rueda del C2 oficial y decía adios al rallye, dejando la pugna por la segunda plaza en un cerrado mano a mano entre Vallejo y Ojeda. El gallego aprovechaba los últimos tramos con humedades en La Faya para marca rel scratch. El siguiente tramo era el siempre temible Santa Bárbara, todo un clásico del Príncipe y en el que Fombona daba un auténtico recital marcando el scratch con su EVO 8 de grupo N por delante de todos los S1600 y dejando prácticamente sentenciada la categoría, ayudado además por los problemas de embrague que experimentaba Burgo.

Luego del reagrupamiento de Roxu, con su ya tradicional desayuno incluido, el último blucle se disputaba sobre suelo sueco y era en su totalidad para Ojeda. El piloto cántabro de Peugeot se adjudicaba los tres últimos scratchs del rallye lo que le valía para llegar a Oviedo en segunda posición a espaldas de un Hevia que se había limitado a administras su ventaja y conseguía una victoria que vale su peso en oro de cara al campeonato. Vallejo tenía que conformarse con la tercera plaza pese a darlo todo y un poco más en los últimos tramos. el Punto, simple y llanamente, no es rival ahora mismo ni para el Clio ni para el 206 ¿o serán los Pirelli que no pueden con los Michelin?

Tras los tres primeros, la cuarta plaza que parecía destinada a Sergio Fombona se le escapaba al gijones entre los dedos al quedarse en una cuneta en la parte inicial de su tramo favorito, Santo Bárbara. Un cruel final para un rallye, hasta ese momento, intachable por parte del piloto gijonés. Con Sergio fuera, Burgo heredaba la victoria de grupo que, unida al abandono de Delgado, le da una interesante ventaja en cabeza del certamen de Grupo N.

El podio del Desafio regional con Raul Iván y Angel Odón en lo más alto

Félix Alvarez se quedó sin rivales en la Clio asturiana

Diez "Bouzas" se llevó al Junior con un Saxo alquilado para la ocasión


El Príncipe era además escenario, por primera vez este año, de las dos copas nacionales. En el Desafio Peugeot, Esteban Vallín reeditaba su triunfo del año pasado con otra demostración de su talento. el de Colunga contenía perfectamente los ataques del catalán Coldecarrera y obtenía una victoria que le viene muy bien tanto en el aspecto moral como en el material, tras el difícil comienzo de temporada. Amador Vidal se clasificaba tercero y ya saborea el título que se le escapó tan cerca del final los dos últimos años.

En el Trofeo C2 de Citroen, otro gallego viene pisando fuerte, cumpliendo los pronósticos que le daban como favorito a principios de temporada. Fernando Rico volvía a ganar tras haberlo hecho ya en Avilés, por lo que empieza a destacarse al frente de la tabla. Segundo acababa Balasch y tercero Cabanes luego de que otros protagonistas como Palomeras o Izaguirre acabaran cediendo tras luchar por el liderato en algunos momentos de la primera etapa.

En las copas regionales ganaron los que llegaban líderes al Príncipe, tanto en el Auto Nalón (Raul Iván Alvarez) como en la Clio (Félix Alvarez), aunque en este último caso el auténtico dominador fue Ricardo Carrera hasta que la rotura de un taco motor el domingo por la mañana le obligaba a abandonar. En la Junior, "Bouzas" vencía con un autoridad en su estreno de un Citroen Saxo VTS que se mostraba muy competitivo y contra el que poco podía hacer Beteta quien, de todas formas, sumó unos importantísimos puntos para la general final de la categoría.
 
 
 
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