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26|09|10

SUBIDA DENIA-COLL DE RATES (CAMPEONATO de ESPAÑA de MONTAÑA, 6ª Prueba)
El nacional de montaña 2010 quedó definitivamente decidido en el Coll de Rates. Con dos nuevas victorias, Fombona se aseguró su quinto título absoluto consecutivo, mientras que Roca sumó la cuarta corona de la Copa CM tras ganar también las dos fases de la subida alicantina. En grupo N, 'Viti' Pardeiro sentención también el certamen a su favor, siendo segundo el sábado y ganando el domingo.

CRONICA

Apemas empezaba el verano cuando a principios de Julio el Campeonato de España de Montaña visitaba Eibar para disputar la subida a Arrate, que se celebraba con un clima nada veraniego. A aquel lluvioso sábado seguían más de dos meses de estío ‘de los de antes’, soleados y calurosos, en los que el nacional de montaña se ‘tomaba vacaciones’, para retornar, ya con el otoño recién comenzado. La nueva cita, a finales de septiembre, era con la subida al Coll de Rates, inicialmente prevista como la última del campeonato 2010, aunque la posterior inclusión de la subida tinerfeña de Guía-Isora, dejaba la prueba alicantina como penúltima de un calendario corto y bastante descompensado en fechas, fruto de la crisis general, a la que difícilmente podía escapar un certamen como el de subidas que, aunque suene raro, lleva ya varios años ‘cuesta abajo’.

Fombona ganó los dos días y se aseguró su quinto título consecutivo

Borreguero estuvo rapidísimo todo el fin de semana y no se lo puso nada fácil a Fombona

Flores retornó al nacional con dos podios y dos claras victorias en grupo A

Tras dos años coincidiendo en fechas con el rallye de Llanes, en los que había estado ausente de la prueba levantina, me tocaba volver a emprender el largo viaje Gijón-Denia, que esta vez era mucho más llevadero. Aprovechando que en Asturias tocaba ‘fin de semana sin carreras’, me acompañaba Jose con el fin de grabar imágenes para los reportajes de TVMotor. El nacional de montaña es uno de los certámenes que, desde el principio, hemos tratado de seguir más en profundidad. Pero, hasta ahora, lo habíamos hecho a base de repartir mi tiempo en cada prueba entre la cámara de fotos y la de vídeo, por lo que, salvo en las pruebas asturianas, ni la cantidad de imágenes ni su calidad (¡nunca había grabado vídeo hasta inicios de este año en Ubrique!) eran, ni de lejos, lo que queremos lograr. En esta ocasión, con Jose dedicándose a grabar todas las mangas y yo volviendo a mi más habitual labor de sacar fotos, hablar con unos y otros y tomar notas, el trabajo estaría mucho más repartido… empezando ya por el de conducir, que el trayecto se hace largo para uno sólo, mientras que entre dos el viaje parece siempre más corto y es mucho más entretenido.

Aun así, la ‘kilometrada’ hasta llegar a orillas del mediterráneo nos hacía acabar llegando a Denia a eso de las 7 de la tarde. Así que cuando finalmente dejábamos el equipaje en la base habitual de ‘cita’ en aquellas tierras (el hotel Adsubia) y nos dirigíamos a la calle peatonal que es, cada año, sede de las verificaciones y el parque cerrado, ya caía la noche y poco más había que hacer que sacar algunas fotos y cambiar las primeras impresiones con los miembros de los diferentes equipos, que esperaban la apertura del parque tomando algo en las terrazas que rodean este inusual escenario para el arranque de una prueba de montaña: una céntrica calle peatonal de una localidad costera.

De camino, mientras Jose llevaba el coche durante buena parte del largo trayecto, había aprovechado para ‘hacer números’ y tener clara la situación de los campeonatos que faltaban por resolver. En Arrate ya habían quedado vistos para sentencia el de GT (a favor de Angel Castro, presente de todas formas en Denia con su nuevo Cupra GT), y el de grupo A (ganado ya por Maldonado, que se quedaba en casa, habiendo vendido recientemente su Ibiza Kit Car para adquirir el Córdoba WRC a Manuel Cabo). Los demás (absoluto, grupo N, clásicos y Copa CM) podían resolverse ya a lo largo del fin de semana, y tras ‘echar unas cuentas’ las conclusiones eran las siguientes: tanto en el absoluto como en CM, dos victorias de los actuales líderes (Fombona y Roca) les darían ya el título de forma matemática, mientras que en grupo N y clásicos, a Viti y Serratosa les bastaba con acabar para asegurarse sus respectivos certámenes. Todo ello perfectamente posible por lo que, de producirse, la inesperada inclusión de la subida canaria en noviembre podía resultar totalmente innecesaria, convirtiendo a la nueva prueba en un mero trámite por lo que respecta a los diferentes títulos puestos en juego esta temporada.

Aznar no acabó de estar a gusto en el trazado de Rates, siendo cuarto el sábado y quinto el domingo

Buen estreno en el nacional para el Cupra GT de Angel Castro, cuarto absoluto el domingo

Gallardo fue sexto en la Fase A con su Audi A4

Tras comprobar el viernes en el parque cerrado la presencia de las principales novedades que ofrecía la corta lista de inscritos, en la que destacaba los retornos al nacional de Luis Flores y su Peugeot 206WRC, o JJ Fernández y su EVO IX (con el que ha estado ‘de gira europea’ compitiendo con buenos resultados en el certamen continental de montaña), el sábado a media mañana emprendíamos camino a Parcent, localidad situada unos veinte kilómetros hacia el interior y punto de arranque de la carretera del Coll de Rates por la que discurre la prueba.

Los pronósticos del tiempo daban alguna probabilidad, aunque no muy alta, de lluvia, pero el cielo estaba bastante despejado sobre la zona cuando dejábamos el coche al lado de la asistencia de los Castro, al inicio de la larga recta que sirve tanto de ‘parque de trabajo’ como de arranque de la prueba. Parecía que, por fin, íbamos a tener una subida del nacional 2010 sin agua y, efectivamente, así sería, aunque al final de la tarde del sábado unos nubarrones bastante negros se llegaron a cernir sobre la cima haciéndonos temer por una mojadura más que, finalmente, no llegó a producirse. 

Como Jose tenía previsto grabar las seis mangas, a disputarse a lo largo de los dos días, en ubicaciones siempre diferentes, empezábamos ‘de arriba abajo’, arrancando para la primera de libres en la cerrada horquilla de derechas situada cerca de la mitad del recorrido. Al ser la subida no muy larga (tres kilómetros y medio), la caminata cuesta arriba no era excesiva, y de ahí en adelante ya sería cuestión de ir ‘ganando metros’ cuesta abajo que siempre son más llevaderos.

En la cuneta nos encontrábamos, ejerciendo de comisario de ruta, con Emilio Palencia, al que conocimos en esta prueba hace unos años cuando participó al volante de un BRC y con el que habíamos coincido unas semanas antes en el Príncipe, donde copilotó a Pinilla camino del podio de la Copa Suzuki. Emilio, todo afición, daba ejemplo colaborando, bandera en mano, con la seguridad de la prueba, y nos ayudaba a buscar la mejor ubicación, de modo que las siempre omnipresentes cintas de plástico no fuesen obstáculo para las tomas de vídeo desde la amplia escapatoria. Pero lo que el plástico no tapaba lo acababa haciendo el M3 de Lirola, que se detenía en el exterior de la curva al notar el almeriense como los neumáticos iban rozando peligrosamente contra la fibra de los pasos de rueda traseros. Así que Jose tenía que moverse más hacia el inicio del viraje, lo que le impedía grabar la toma que le hubiese gustado, y en la que habrían entrado tanto el semitrompo del Lotus de Noguera, como las cruzadas del Seat de Clemente o los CM, entre los que destacaba las ganas con las que subía ya Pedro Roca, como queriendo demostrar desde el primer momento que quería dejar el título sentenciado este fin de semana. Una sensación que también dejaba el Audi de Fombona, cuyo sonido, redondo y rotundo, había abierto las hostilidades en virtud del número uno en sus puertas y del habitual orden de salida de la manga de libres, con los ‘grandes’ primero.

JJ Fernández ganó el grupo N el sábado pero se salió en entrenos el domingo

'Viti' se aseguró el título de grupo N y lo celebró con victoria de la categoría en la Fase B

Blanco Rosales fue tercero de grupo N el sábado y segundo el domingo

Sin interrupción alguna, la primera toma de contacto discurría con fluidez, lo mismo que la segunda, que seguíamos desde una izquierda a escuadra donde se echa en falta un pretil de hormigón contra el que, hace ya unos años, probó Aznar la resistencia del crashbox frontal del BRC. En lugar del característica bloque de piedra hay ahora un más moderno y seguro guardarail, tanto en el exterior como en el interior, contra el que nadie impactaba, aunque había quien los ‘limaba’ bastante, volviendo a destacar en esa faceta el Silver de Roca, que apenas si dejaba espacio entre su carrocería y la valla interior, de tanto como se ceñía en busca de la trazada ideal.

Otra breve caminata cuesta abajo nada más terminada la manga y ya estábamos en la popular redonda de izquierdas donde se reúne siempre más cantidad de público en esta prueba. Con tiempo de sobra para tomar un refrescante Aquarius, era momento de dejar a Jose grabando por allí cerca la subida oficial mientras yo bajaba hasta la asistencia y ‘me enteraba de algo’… porque lo bueno de ver la subida como un aficionado más es que disfrutas del paso de los coches, pero lo malo es que no te enteras prácticamente de nada en cuanto a como van las cosas o que les ha podido pasar a unos o a otros.

Un rápido vistazo al monitor de tiempos de Motorinfoservice en la línea de salida me daba ya algunas más pistas de cómo se presentaba la manga final de la Fase A. En el campeonato de España, Borreguero había marcado la pauta en las dos subidas de entrenos, seguido siempre de cerca por Fombona y con los dos claramente destacados del resto, siendo Flores tercero, a más de tres segundos y con similar ventaja sobre un Aznar que, o se guardaba mucho o no andaba fino. Evidentemente, en la montaña ‘todos mienten’ en las subidas de práctica, que se convierten muchas veces en una especie de partida de póker, así que la duda era si el almeriense ‘iba de farol’ o ‘tenía juego’, algo, esto último, que quien seguro que si lo tenía era Fombona, como el mismo me confesaba cuando le preguntaba al respecto. Su 2.11.1 estaba a tres segundos de su record de la prueba, así que margen de mejora había para el asturiano. Un margen que era menor para Borreguero, consciente de que ‘estos dos se guardan bastante’, como me decía cuando le preguntaba por los cronos de sus rivales, mientras que Aznar, por su parte, me respondía con una sonrisa y un ‘cuando hay que correr es ahora’, que denotaba su confianza en que iba bajar, y mucho, el discreto 2.17 que le situaba demasiado lejos de la lucha por la victoria. Una confianza que el andaluz basaba en los consejos que le había dado Andrés Vilariño sobre como afrontar una prueba que, sea por el golpe del 2004 comentado más arriba o porque, simplemente, a veces un trazado se le atraganta a un piloto, nunca le había acabado de salir del todo bien.

Segunda plaza de GT el sábado para el Ferrari de Abia

Lirola fue segundo de grupo A los dos días, entrando el domingo entre los diez primeros de la general

El local Parra completó el podio del grupo N en la fase B

Pero de la teoría a la práctica hay siempre un trecho, y cuando en la zona de salida de la manga final veía como el crono de Aznar apenas si bajaba del 2.14, quedándose lejos del 2.12.8 con el que Flores lideraba desde hacía un rato en virtud de su elevado número de salida, me quedaba claro que, volviendo a lo del póker, José Antonio ‘no llevaba buenas cartas’, por lo que la ‘última mano’ iba a ser cosa de Fombona y Borreguero. Viéndolos arrancar la sensación que dejaba Fombona era mejor, pero eso dice poco o nada, así que había que esperar un par de minutos, desde que cada uno desaparecía por la larga rampa que sigue a la primera curva de la subida, para despejar dudas y saber, definitivamente, quien se llevaba todas las fichas que se habían ido poniendo sobre la mesa desde el inicio de la partida. Y aunque Borreguero mostraba una magnífica mano, siendo su 2.08.698 algo así como un ‘full de nueves y reyes’, cuando Fombona paraba el crono, su 2.08.105, a milésimas de su propio record, equivalía a un ganador ‘poker de ases’… tantos como títulos ya en su haber y camino de añadir uno más si el domingo lograba repetir victoria.

Y si el gijonés ponía ya las bases para asegurarse el campeonato al día siguiente, otro tanto había hecho minutos antes, no sin suspense, Pedro Roca. La lucha por la victoria entre los CM tenía el importante condicionante para el piloto del Silver plateado (¡valga la redundancia!) que suponía la inoportuna y molesta avería en el sistema de cambio por levas en el volante. En la asistencia, su equipo se afanaba por resolver el problema, y cuando Pedro se subía al coche, camino de la zona de salida, todo parecía volver a funcionar. Pero nada más arrancar, el sonido al pasar de primera a segunda ya delataba que el fallo seguía ahí, el ‘cutoff’ no iba y Roca tendría que hacer toda la ascensión ‘cambiando a la antigua’, lo cual siempre supone unas milésimas aquí y otras allá que, sumadas, acaban siendo un importante handicap. Pero no es la primera vez que observo como el mallorquín se crece cuando las cosas se complican, y su extrema concentración cuando me acerqué a él minutos antes, en el camión, era buena prueba de que, con o sin ‘cutoff’, iba a darlo todo en busca de la victoria. Y así era, pese a que su gran rival por el título, Iñigo Martínez, subía realmente rápido con su recién pintado e inmaculado BRC, parando los dígitos del display en un excelente 2.02.387, no muy lejos del fantástico record de Roca del 2007, lo cual, teniendo en cuenta que las gomas ‘monomarca’ actuales son menos perfomantes, era todo un logro. Un logro insuficiente, en todo caso, porque Roca, no se muy bien como, encontraba las décimas que le hacía perder la electrónica y las compensaba con esa mezcla de clase y valor que diferencia a los campeones de los buenos pilotos. Pedro pulverizaba su viejo record y lograba la que puede haber sido su mejor victoria del año, dejando ya la tarea medio hecha de cara a cerrar definitivamente el campeonato al día siguiente.

Pedro Roca sentenció la Copa CM con otras dos victorias

Iñigo Martínez se despidió de sus opciones al título y tendrá que conformarse con el subcampeonato

Aritz Egozkue estuvo a poco más de una décima de la victoria en la fase B

Los que no esperaban al domingo para sumar los puntos que les aseguraban sus respectivos títulos eran ‘Viti’ Pardeiro y Rafael Serratosa. En grupo N, el asturiano acababa segundo, tras un bonito duelo con José Joaquín Fernández en el que ‘Viti’ no tenía nada que ganar pero no por ello iba a rendirse sin luchar, lo que obligaba a JJ a sacar todo lo aprendido por esas rampas europeas para llevarse una muy trabajada victoria.
En clásicos, el valenciano ‘usaba la calculadora’ y subía pensando más en el campeonato que en la victoria parcial, acabando tercero por detrás del siempre exuberante Clemente y del no menos agresivo este fin de semana Noguera.
Misión cumplida, por tanto, para ‘Viti’ y Serratosa y dos títulos más que quedaban resueltos.

La corta participación y lo fluido del desarrollo de las tres mangas hacía que estuviésemos ya camino del hotel a eso de las seis y pico… lo que nos permitía esquivar, por los pelos, la ya clásica carrera de atletismo popular que se organiza siempre por estas fechas en el cercano pueblo de La Xara… en la que había quedado bloqueado durante un buen rato en mis dos últimas visitas a Denia. Esta vez pasábamos cuando todavía no se había cerrado la carretera al tráfico, y ello nos permitía llegar pronto al hotel, ducharnos, cambiarnos, dejar iniciados, mientras nos tomábamos una caña, varios de los textos sobre las actuaciones de los diferentes clientes que completaríamos al día siguiente, y ponernos a cenar en horario casi europeo, con lo que, aun tras larga charla de sobremesa, todavía nos íbamos pronto a dormir de cara a madrugar sin problemas a la mañana siguiente.

Aunque en la tarde del sábado, las nubes se habían ido oscureciendo y adueñando del cielo, al final se batieron en retirada, y el domingo amanecía mucho más despejado que la víspera. Ya en otoño, el nacional de montaña 2010 iba a tener, por fin, un fin de semana totalmente sin agua. Algo que agradecía especialmente el primer piloto que nos encontrábamos en la zona de asistencia cuando llegábamos a Parcent a primera hora del domingo, Ángel Castro. El madrileño había sumado el sábado su primera victoria en GT con el Cupra-Lamborghini, pero con cronos todavía lejos de los puestos de cabeza, por lo que la perspectiva de poder rodar en otras tres mangas sobre seco le hacía mostrarse optimista de cara a ir mejorando tiempos y reglajes con el espectacular vehículo, sin duda el más admirado, filmado y fotografiado de todos cuantos competían en la prueba.

Dos cuartas plazas para Pantxo Egozkue, que pasa a ocupar igual posición en la general de la copa CM

Joaquín Nachón repitió sus resultados de Arrate: quinto en la Fase A y sexto en la B

El local Mateo Lirola se impuso los dos días en CM1 y el domingo acabó además quinto de la Copa CM

Otro que esperaba mejorar tiempos y reglajes era Aznar, que no había acabado nada contento con el resultado del sábado y se disponía a hacer algunos cambios en su A4 que le permitiesen estar más cerca de la lucha por la victoria. Siguiendo ruta hasta la línea de salida, pasábamos por la asistencia de ‘Viti’ que, ya campeón de grupo N, se lo tomaba con calma y optaba por no salir en los libres. A su lado, en BRC, se trabajaba en los coches de Iñigo Martínez, dispuesto a aplazar la coronación de Roca, y de Joaquín Nachón, cada vez más rápido y que el sábado se había quedado a unas décimas de toda una referencia en esto de ir deprisa por una carretera de montaña como es Pantxo Egozkue. Cerca del box de BRC estaba el de Saica, con la familia Serratosa compartiendo su común afición a las carreras al lado de sus preciosos clásicos, el Jaguar del padre y el Porsche y el Mini de los más jóvenes del grupo. Todos ellos, junto a la nutrida representación de Alteauto, encabezada por ese viejo conocido que es el 206 S1600 del siempre amistoso Pepe Lavios, ocupaban el espacio situado a la entrada del cementerio que, cada año, produce un extraño y hasta ligeramente macabro contraste… especialmente si se piensa que estamos hablando de un deporte de riesgo y en el que las supersticiones tienen bastante cabida. Pero es como si todos diésemos la espalda a esos blancos muros que delimitan el ‘camposanto’, dirigiendo nuestras miradas en la otra dirección, la que marca la cinta de gastado asfalto en la que se encuentran el resto de equipos, alineados camino de la raya de salida.

Ese camino era el que seguíamos, a eso de las 8:15, para poder llegar a la redonda de izquierdas a tiempo de situarnos de cara a la manga de libres, que se iniciaba apenas pasadas las 8:45. Aunque a esas horas de un domingo uno puede estar aún algo amodorrado, el intenso sonido del Audi de Fombona tuvo que despertar hasta al más dormido. Pese a que se trataba sólo de la primera subida de práctica del día, el gijonés llegaba realmente ‘enchufado’ a las ondulantes eses que preceden el viraje, por el que pasaba fortísimo en lo que, según nos comentaría después, era su forma de comprobar la adherencia del asfalto en esa importante zona de la subida. Aunque en meta su crono era alto, el tiempo intermedio denotaba con claridad como había subido realmente deprisa en esos primeros metros, sentando las bases de esa segunda victoria que, de conseguirla, le daría ya el título.

La manga de libres se interrumpía brevemente debido a un toque del Speed Car de Saúl Arnau, que no tenía mayores consecuencias, así que una vez concluida me dirigía a la zona de asistencia, ya que con las fotos de acción del día anterior y con las que sacase en la manga final, desde la primera curva, iba a tener más que suficiente. Así podría, además, seguir bien de cerca como preparaban los diferentes equipos el último asalto del fin de semana. Empezaba mi ronda por el box de Aznar, que se mostraba algo más satisfecho tras haber hecho su mejor primer parcial en la manga de libres, usando la de oficiales para ‘probar cosas’ en el segundo. De todas formas, sus cronos seguían siendo demasiado altos como para pensar que pudiese mezclarse en el duelo Borreguero-Fombona, que se presentaba, de nuevo, muy cerrado. Que Raúl estaba corriendo, y ‘haciendo correr’ a José Antonio, me quedaba claro cuando este último se preocupaba por la cantidad de gasolina que su mecánico, Manuel, echaba en el depósito de su Audi. Si había que afinar hasta los últimos kilos en el peso es que el margen era escaso, lo cual no era de extrañar viendo que en los entrenos oficiales Borreguero ya había estado en su crono de carrera de la víspera… ¡para batir ‘al panete’ iba a haber que ‘tirarse con ganas’!

Doble triunfo en clásicos para Clemente y su Seat 124

Noguera rodó así de agresivo con su Lotus camino de dos segundas plazas en clásicos

Rafael Serratosa confirmó el título de campeón acabando tercero de la Fase A y cuarto de la B

En CM las cosas parecían, en cambio, más claras que el día anterior. Con su Silver funcionando ya a la perfección, Roca estaba mucho más tranquilo, consciente de que debía tener margen suficiente, mientras que en BRC, tanto Iñigo como Nachón no acababan de estar muy convencidos con los reglajes de sus CM05EVO, que se movían más de la cuenta.

El grupo N, que el sábado había deparado una bonita pelea, el domingo tenía un desenlace brusco y nada agradable. En la primera curva de la subida de entrenos oficiales, JJ perdía el control de su EVO, que se iba hacia el exterior, metía la rueda delantera derecha en la cuneta y efectuaba, de inmediato, una espectacular cabriola, sin que su piloto tuviese tiempo de saber que estaba pasando antes de ver ya sólo asfalto a través del parabrisas. El golpe dejaba bastante tocado el Mitsubishi del simpático piloto ibicenco, para el que una temporada llena de satisfacciones por su periplo europeo terminaba del peor modo posible, con un golpe y una notable factura de daños. Injusto desenlace para un fin de semana que JJ y su padre afrontaban con esa ilusión que siempre ponen en todo lo que hacen y con la que suplen la crónica falta de presupuesto que da aun más mérito a su ‘aventura europea’, sobre la que nos habló para una entrevista que próximamente publicaremos en TVMotor.

Con el mal sabor que me dejaba ver los daños en el EVO de ‘Jota’, me dirigía a la curva en la que había sufrido el percance, donde ya me esperaba Jose para grabar desde allí la manga final del fin de semana. La amplia izquierda que sigue a la corta recta de salida es siempre buen sitio para ver la arrancada y los primeros metros, sacando alguna foto y pudiendo volver rápido en dirección a los monitores de tiempos una vez pasa el coche R que cierra la última subida del día. Nada más llegar ante la pantalla, lo primero era ver si tanto Roca como Fombona habían vuelto a ganar, decidiendo definitivamente los campeonatos absoluto y de CM. Y, efectivamente, tanto uno como otro lo lograban. En CM, el balear superaba con holgura a su rival por el título, Iñigo Martínez, aunque vencía con menos margen del previsto, ya que Aritz Egozkue se le acercaba de forma espectacular, terminando segundo a poco más de una décima. Entre los turismos, el asturiano ganaba esta vez con más diferencia, al cometer Borreguero un error que le costaba el tiempo suficiente como para quedarse a un segundo de su tiempo de entrenos.

Con los dos títulos que quedaban por decidir ya resueltos (poker de campeonatos para Roca, repoker para Fombona), el resto de posiciones casi no importaban, pero no por ello había que dejar de prestarles atención. Así que aprovechábamos la cola de coches camino del parque cerrado tanto para grabar las entrevistas con los ganadores como para conocer las impresiones de los que no habían vencido. De estos últimos, destacaría la honradez de Aznar, que no buscaba excusas a su flojo 2.15.6 que le enviaba a una lejana quinta plaza. El almeriense definía con un rotundo ‘muy mal’ su actuación en una subida que, definitivamente, se le atraganta, con dos o tres sitios en los que, nos confesaba, le falta la suficiente confianza. Por delante del Audi terminaba, el domingo, Angel Castro, mostrando una notable progresión en sus cronos lo que le permite mirar con optimismo las posibilidades futuras de su imponente Cupra GT. Un optimismo que también se dejaba ver en las palabras de Luis Flores, contento con sus dos terceras plazas y, sobre todo, con sus cronos y su ritmo tras tanto tiempo sin competir. Ahora sólo falta que pueda reunir el presupuesto necesario para volver a ser un asiduo al campeonato el año próximo como lo fue en pasadas temporadas.

El podio de clásicos de la fase B lo completó Rafael Serratosa Junior, muy rápido con el 911

Dos quintas plazas en clásicos para Vicente Cabanes y su Opel Manta

Dos podios de grupo A para el EVO V de Porcar

Tras completar las diferentes entrevistas que podéis ver en el apartado de ‘protagonistas’ del reportaje de TVMotor, era ya el momento de emprender camino de vuelta a casa. El hecho de ir dos en el coche significaba poder turnarse en el largo viaje de vuelta, de forma que Jose condujese cuando empezase a oscurecer, con lo que no hacía falta quedarse el domingo en Denia y emprender el viaje de retorno a primera hora del lunes, como solía hacer cuando iba sólo para evitar la noche, ya que mi ‘visión nocturna’ no es precisamente buena que digamos. Así que, al marchar nada más terminar la prueba no era sino unas horas después, cuando ya iba tecleando las diferentes crónicas en el portátil, dando por ‘cerrados’ todos los títulos del nacional de montaña 2010, que me enteraba, vía telefónica, de que a punto había estado de haber cambios en una de las clasificaciones, la de CM. Una reclamación presentada por Luis Martínez, padre de Iñigo, contra los Silver, en la que se discutía el tamaño de sus espejos retrovisores y la presencia de unos adhesivos de publicidad obligatoria, ponía un inesperado suspense extra al resultado de la carrera. Pero, aunque hechas las oportunas comprobaciones resultaba que, en efecto, faltaban las pegatinas y los espejos eran algo menores que lo estipulado en el reglamento, los comisarios deportivos tomaban una decisión que me parece la más adecuada en estos casos, estimando la irregularidad como una falta que merecía una sanción económica… pero sin repercusiones en la clasificación, ya que su influencia en el rendimiento del vehículo era inexistente. Desde luego, una cosa tengo clara, si Roca ha ganado ocho de doce carreras en lo que va de año no es por llevar unos retrovisores unos milímetros más pequeños de lo que dicen las normas. Así que, ya que tantas veces criticamos unos y otros a los ‘árbitros’, me parece de justicia felicitar a los comisarios deportivos por haber sabido aplicar en esta ocasión el espíritu del reglamento, resolviendo del mejor modo un asunto que hubiese empañado tristemente el final de un campeonato en el que Roca y Martínez han peleado duro pero limpio en la carretera, y ha sido esta la que ha dictado sentencia.

Gregorio Castro fue segundo de GT el domingo

Lirola Junior fue cuarto de grupo A los dos días

El patrón de Alteauto, Pepe Lavios, no quiso perderse la subida de casa

Comentando esto con unos y otros a través del teléfono, el viaje se iba haciendo menos pesado (al menos para mi, ¡que Jose seguro que no opina lo mismo, ya que fue quien más condujo!), y a eso de las 11 de la noche ya estábamos de vuelta a casa. Con la subida Denia-coll de Rates se cerró ‘de facto’ el nacional de montaña 2010, y aunque trataremos de conseguir imágenes e información de la prueba tinerfeña, ya no estaremos allí en directo para seguir de cerca la última prueba del campeonato de este año a la que pocos de los habituales tienen previsto ir, al menos a día de hoy. Un campeonato que concluye con los resultados esperados en todas las categorías. En particular, el quinto título absoluto para Fombona se veía venir desde antes siquiera de que arrancase la temporada, y aunque el golpe del sábado en el Fito le complicó algo las cosas, el gijonés se ha vuelto a mostrar superior, dejando claro que sigue siendo ‘el jefe’ de la montaña española. O el ‘Schumacher de las subidas’ como le decíamos cuando le dábamos nuestra más sincera enhorabuena por ese quinto campeonato consecutivo, al más puro estilo del alemán en su época dorada con Ferrari en la Fórmula 1.

Ahora falta ver si añade un sexto el año próximo, cuando el nacional de montaña afrontará una campaña que puede empezar a marcar una ligera recuperación después de las dificultades de estas últimas temporadas. Es pronto aun para decirlo, pero al menos parece que hay síntomas de mejoría en un enfermo al que pocos se han preocupado de cuidar últimamente. Al menos, por lo que se comentó en la reunión entre pilotos y federativos que tuvo lugar antes de la subida de este fin de semana, hay voluntad de cambiar cosas. Y ese ya es un primer paso. Propuestas como la de crear dos campeonatos independientes para los carrozados y los CM, la de reducir a la mitad el precio de las inscripciones (aunque sea a costa de eliminar los premios), o la de modificar la puntuación (eliminando los puntos por clases y adoptando la tabla del mundial de motos para premiar a los quince primeros al scratch), van en la buena dirección y pueden atraer algún participante más. Ninguna es la panacea, eso seguro, pero tras tantos años de inmovilismo todo lo que sea cambios que puedan mejorar algo han de ser bienvenidos. La montaña se merece recuperar prestigio, y aunque aun haya mucho por hacer, al menos parece que las cosas se empiezan a mover en la buena dirección.