Cada año vamos al Fito con sensaciones mezcladas, en lo positivo está la excitación y las ganas de ver los mejor de la montaña europea en un marco realmente incomporable, en lo negativo cada año pesa más la preocupación y hasta el miedo por la cada vez mayor y más descontrolada asistencia de público.

Este año, la coincidencia, por segundo año consecutivo, con el Rallye Cantabria-Infinita, hacían que el viernes, durante las verificaciones y el sábado, en la jornada de entrenos, la afluencia de espectadores fuese importante pero "razonable" tanto en número como, sobre todo, en comportamiento. De hecho, el desarrollo de la jornada de entrenamientos, en la tarde del sábado fue admirable, con las dos mangas disputándose con absoluta fluidez y sin la menos interrupción. Los pocos incidentes producidos en la segunda de ella (salidas de pista como las de Iñigo Martínez y Simone Faggioli principalmente) se resolvieron con prontitud y eficacia y nos fuimos para casa con muy buen sabor de boca y el pensamiento de que, tal vez, este año las cosas iban a salir como todos queremos que salgan, es decir perfectas.

Pero llegó la noche del sábado, el número de espectadores se disparó y, lo que es peor, el ya habitual "desmadre" festivo en que se ha convertido el fin de semana del Fito en Arriondas, comenzó a pasar factura. De ahí al resultado de todo lo vivido en la mañana del domingo no había más que un paso. Con público no ya bien o mal colocado, sino simplemente cubriendo absolutamente todos los rincones posibles a ambos lados de la calzada, cualquier mínimo incidente veía multiplicado su peligro.
No vamos a detallar uno por uno los diferentes accidentes que obligaron a interrumpir ni se sabe cuantas veces la primera subida oficial, dando lugar a varios heridos (por fortuna leves) entre el público. Baste con decir que una subida que el sábado se había terminado en apenas 40 minutos ¡duró más de tres horas!
Las cosas no es que mejorasen mucho en la segunda oficial, que empezó con las muy preocupantes noticias del accidente del Corsa de Raúl Sánchez, pero, al menos, hubo la suficiente suerte para que todo quedase en más sustos, más heridos leves y una hora más de retraso que, a estas alturas, ya poco importaba.
Al final, alivio porque todo acabase y, por desgracia, sensación de que lo deportivo quedaba en un segundo plano, así que vamos a pasar definitivamente página en lo que respecta a la crónica de sucesos y centrarnos en lo que verdaderamente fuimos a ver a las rampas del Fito, pilotos y máquinas dando el máximo por unas rampas preciosas a la vez que selectivas en las que quien destaca es por que tiene clase y manos además de caballos en su motor.

Campeonato de Europa

Los tres primeros al scratch, en el centro Ander, flanqueado por Regosa y Merli

Ander Vilariño debutó en el Fito a lo grande dominando a placer con su FNippon

Giulio Regosa hizo gala de su experiencia para remontar en la segunda manga

El europeo de este año se presentó ya en su primera cita en Rechberg un tanto descafeinado respecto a temporadas anteriores. Parece que la tan temida crisis económica se extiende más allá de nuestras fronteras y este año son bastantes menos los pilotos y equipos con intención de afrontar la serie continental en su totalidad. De todas formas, como por estos lares estamos poco acostumbrados en los últimos años a ver maquinaria como la que traen los punteros del campeonato, alicientes seguía habiendo de sobra para acercarse hasta Arriondas y disfrutar con las evoluciones de las mejores Osellas y los monoplazas más rápidos de la Copa FIA. Estos últimos eran, lógicamente, los favoritos al triunfo absoluto, ya que las barquetas, restringidas en motor y aerodinámica, no pueden ahora mismo emular los cronos marcados hasta hace apenas dos años y que permitían a sus mejores pilotos poner en jaque a los fórmulas más rápidos en trazados virados como el del Fito.

Este año, además, la llegada de varios Formula Nippon, básicamente F3000 pero procedentes del Campeonato Japonés y más evolucionados que las unidades del europeo como las utilizadas el año pasado por Regal y Vilariño, hacía aun más complicada la papeleta de los pilotos de Osella. Eso y la presencia a los mandos de uno de los Nippon de un piloto joven y con el nivel de calidad de Ander Vilariño. El hijo de Andrés venía por primera vez al Fito con ganas de sacarse la espina de sus problemas en Rechberg y el sábado, en los entrenos, ya mostraba sus pretensiones, rodando en los tiempos de su padre en ediciones anteriores. De los pilotos de las barquetas, sólo Faggioli podía tener una mínima posibilidad de acercarse a Ander, pero el doble campeón italiano, tras ser segundo en la primera manga del sábado, se salía en la segunda, dañando el frontal de su Osella y emepzando un fin de semana que sería negro para sus aspiraciones.

1ª oficial: Ander se acerca al record, Faggioli fuera

Cualquier posible duda en cuanto a cual sería el nombre del vencedor absoluto de esta edición del Fito quedaba despejada en la primera subida oficial. Faggioli convertía en inútil el trabajo de su equipo en la tarde-noche anterior reparando los daños de PA21, y se volvía a salir quedando definitivamente eliminado de toda opción. Ander, por su parte, daba muestras de su innata rapidez y bajaba ya con holgura los cronos de su padre, acercándose peligrosamente al record absoluto de la subida, en manos de Tschager desde hace tres años con 2:32:615 ¡y que, no se por qué razón, nadie parece recordar!

Sin ningún otro que pudiese, ni de lejos, hacer sombra a Ander, la lucha por la supremacia entre las CN que son las que se llevan los puntos del europeo absoluto, deparaba la sorpresa de ver al debutante Merli por delante de los veteranos Regosa y Bormolini. Christian conseguía siete décimas de ventaja sobre Giulio y entre ambos parecía claro que iba a estar el vencedor ya que Fausto cedía ya dos segundos.

El segundo de los monoplazas de la Copa FIA era el veterano Pancho Egozcue, pero a 11 segundos del tiempo de Ander y superado por las tres primeras barquetas. Pancho superaba con facilidad a un decepcionante Napione, en absoluto competitivo con su Nippon "look Ferrari". El otro F3000 que estaba en los tiempos de los dos anteriores, el Ralt de Víctor Abraham, abandonaba con problemas de motor, mientras que Szasz, con el otro de los espectaculares Nippon presente ¡era más lento que los tres primeros CM!

Entre los turismos del europeo ¡el mejor era un español! Y es que Luis Flores batía con su 206WRC al imponente Escort Kit Car de Maly, algo lógico por otra parte, dado el tipo de monturas en ambos casos. el checo se había quedado sin su máximo rival en este inicio de temporada, el Skoda Kit Car de Jan Michel que se accidentaba aparotasemente sin siquiera llegar al primer cruce. Justo tras Maly se situaban los dos mejores geupo N, el estruendoso EVO de Jurena y el mucho más silencioso pero tanto o más eficaz BMW de Weidinger. Bonito duelo también en SP, con el BMW de Vojacek precediendo en apenas medio segundo al Escort del ex-barquetero Doubek.

2ª oficial: Ander vence, Regosa remonta

Con el crono como único rival, Ander Vilariño volvía a ser, de lejos, el más rápido, rebajando otras tres décimas y acercándose algo más al todavía imbatido registro de Tshager. El triunfo absoluto y en la Copa FIA era pues para el heredero de la saga Vilariño, que puede haber iniciado en el Fito un palmarés en montaña que, en unos años, poco o nada tenga que envidiar al que atesora su padre. Desde luego, juventud y clase no le faltan al joven piloto vasco que mostró lo que alguien con su sólida base formativa obtenida en los circuitos puede hacer con uno de estos espectaculares monoplazas en una carretera de montaña.

La emoción la pusieron, sin embargo, las barquetas del europeo. Regosa reaccionó como sólo un gran veterano como él puede hacer y, aprovechando que Merli empeoraba en dos segundos su crono anterior, remontaba para hacerse con los puntos del europeo ¡por poco más de 4 décimas! Bormolini era el único e las tres Osella de cabeza que mejoraba sus cronos pero ello no le bastaba para mejorar su tercera plaza final entre los CN, por detrás el sorprendente Merli, segundo y que nos ha dejado una grata impresión.

Entre los carrozados, Maly se lo tomaba con calma, sabedor de que Michl ya no estaba en carrera, y no sólo era superado de nuevo por Flores sino que le batían también los dos mejores grupo N. Entre estos, Weidinger remontaba la diferencia que le había sacado Jurena para ahcerse con su segundo triunfo del año, aunque fuese por un margen tan exiguo como las 8 décimas de segundo que separaron a los dos contendientes tras la suma de las dos mangas. Donde no había cambios era en SP, Vojacek volvía a batir a Doubek y se llevaba una nueva victoria en una categoría que no acaba de convencer ni a pilotos, sólo seis participantes, ni a público.

Campeonato de España

Por primera vez este año el podio del nacional fue el mismo en las dos fases

Dos nuevas victorias para Carlos Hernández que camina directo al título

Fombona lo intentó pero no pudo contener el ataque de Carlos el domingo

Mezclados entre los participantes del europeo, los mejores coches del campeonato de España tenían su propia guerra particular durante todo el fin de semana. Obviamente el máximo protagonismo lo debían acaparar Carlos Hernández y José Antonio López Fombona y en esta ocasión, por primera vez en lo que va de año, podiamos por fin asistir a un duelo directo entre ambos. Duelo que se decantaba el sábado de lado del asturiano aunque este no las tenía todas consigo sabedor de los mucho que "controla" el canario sus prestaciones en las tandas de entrenos.

Fase A: Carlos Hernández puede con Fombona

Los temores de Fombona en cuanto a las prestaciones de Carlos Hernández se mostraban perfectamente fundados. El BMW de Coronas establecía un crono inferior en siete segundos al del sábado y el Audi del gijonés no podía más que quedarse en un tiempo similar al de la víspera, con lo que el primer asalto era para Carlos. Tras los dos tenores, Angel Castro se iba acercando, paso a paso, en su primer Fito con el A4, superando a Borreguero que batía, a su vez a Flores, incontestable dominador del grupo A. Jesús García era el siguiente, quinto scratch y segundo de grupo, mientras que su hijo, Javier, único de los habituales del grupo N nacional que se desplazó hasta el Fito, se marcaba un tremendo recto en el cruce de Collia y dejaba la victoria en la categoría, por menos de una décima, en manos del asturiano Javier Antonio Díaz, que conseguía así un resultado de auténtico prestigio con su siempre fiable Citroen Saxo.

Fase B: Más de lo mismo

El resultado de la Fase B fue un calco de lo sucedido en la A. Carlos Hernández volvió a estar fuera del alcance de un Fombona que no acabó de tener su día, y que bastante tuvo con contener el asalto de un Angel Castro, cada vez más rápido, que se quedó a unas décimas de arrebatarle la segunda plaza. Borreguero, Flores y Jesús García repetían también sus puestos de la subida anterior y el único cambio venía en grupo N, donde Javier García no cometía esta vez errores y vencía con la holgura lógica habida cuenta de la diferencia de competitividad entre su EVO y las monturas de los grupo N asturianos presentes en el Fito.

Copa de España CM

Gorka fue el más rápido todo el fin de semana pero sólo se llevo un triunfo...

...la segunda victoria se la dejó en este pesaje...

...y fue a parar a manos de Iván Suárez que también se impuso en el regional

Los CM fueron en el Fito menos numerosos que en Ubrique o Totana pero volvieron a demostrar lo mucho que andan. De hecho, sus cronos les valían para entrar entre los diez mejores al scratch del europeo, buena muestra de la rapidez de estos superespectaculares prototipos.

Fase A: El ya habitual doblete Apalantza-Guitart

Al igual que en las cuatro fases ya disputadas este año, los dos BRC del equipo del Langreo Motor Club ocuparon las dos primeras plazas de la subida inicial del domingo. La única diferencia con las anteriores carreras era que, esta vez, Gorka distanciaba con gran claridad a Guitart, mientras que este debía hacer un
notable esfuerzo para batir a los rapidísmos SpeedCar andaluces de Alberto García y José Antonio Román. Justo tras ellos se situaban "Monchu" e Iván Suárez, bendiciendo su suerte por el hecho de que en el fito las dos fases oficiales fuesen el domingo ya que ambos se quedaron fuera de juego el sábado, el de Automercado con problemas en la bomba de gasolina y el del Tonel con un fallo en el motor.
La igualdad volvía a ser la tónica en la categoría, y salvo los estratosféricos cronos de Gorka, el resto estaban tremendamente agrupados, con sólo dos segundos separando al quinto, Monchu, del noveno, Xuan , quedando por delante de este el cada vez más rápido Fueyo y el hasta ahora tremendamente desafortunado Delfín La Hoz que conseguía, por fin, sus primeros puntos del año.

Fase B: Gorka el más rápido pero demasiado ligero

La subida correspondiente a la Fase B presentaba ya, a la vista de los resultados, el primer cambio en la tónica vivida hasta ahora durante toda la temporada. Iván Suárez había conseguido romper el habitual doblete de Apalantza y Guitart, lo que ya era una sorpresa. Pero no acababa todo tras cruzar la meta y conocerse los tiempos. En el habitual pesaje post-carrera, el BRC de Gorka era encontrado por debajo del peso mínimo, una vez retirada la gasolina sobrante, y el piloto vasco no tenía más remedio que acatar la correspondiente exclusión tal como dicta el reglamento para estos casos. De este modo, Iván se lelvaba la su primera victoria en el nacional, y la primera para un SpeedCar este año, que redondeaba una mañana perfecta para sus intereses, ya que en el cómputo total de las dos mangas suya era la victoria también en la clasificación del Campeonato de Asturias, en el que ya suma dos triunfos tras sólo dos carreras disputadas.
El podio de la CM lo completaban Guitart, abonado al segundo puesto este año, y Alberto García, también ya un asiduo visitante al tercer escalón del "cajón". Los dos siguientes clasificados en la copa CM, "Monchu" y Fueyo, completaban también el podio del regional asturiano, lo que en el caso del jovencísimo Fueyo es un resultado sensacional, en su apenas quinta subida con el BRC.