Yo no se si en McLaren serán supersticiosos o no. Pero, de serlo, el hecho de que el número del primer box que les había tocado en el nuevo circuito de Estambul fuese el 13 ya les debería haber dado una pista de que tampoco aquí iban a conseguir el doblete que tanto necesitan. Porque tal y como estaba el campeonato a los hombres de Ron Dennis y Norbert Haug ya no les bastaba con ganar todas las carreras que quedaban, ni siquiera haciendo doblete en todas ellas tenían la certeza del título ... y tras lo ocurrido en el "Otodrom" aun se les ha puesto más difícil pese a llevarse Raikkonen la victoria.

En la nueva pista "made in Tilke", sin duda la de más personalidad de las diseñadas hasta ahora por el especialista alemán, los McLaren Mercedes volvían a ser los monoplazas a batir. Algo ya habitual desde hace muchas carreras pero que no se acaba de concretar en un 1-2 para el equipo anglo-aleman por diferentes razones. En Renault ya tienen claro que los McLaren están fuera de su alcance en prestaciones puras, pero el colchón de puntos acumulado en favor de Alonso desde principio de temporada se mantiene lo suficientemente "hinchado" como para que el español pueda seguir viendo con optimismo lo que queda de temporada.
En Turquía, Fernando volvió a "sacar petroleo" de una carrera en la que ser tercero era lo máximo a lo que, por competitividad de su R25, podía aspirar. Pero entre que Alonso no se rinde nunca y que Montoya sigue acumulando todo tipo de desgracias (manguera enganchada y "empujón" de Monteiro esta vez para añadir a la ya larga lista de este año), la segunda plaza final supo a victoria. Ceder sólo dos puntos a estas alturas de temporada y con la visible superioridad de los McLaren es, probáblemente, más meritorio que alguna de las victorias de principio de temporada, cuando el Renault era el coche más rápido en pista.

Otro triunfo claro para Raikkonen que puede no ser suficiente (foto Daimler-Chrysler)

Alonso sigue sumando camino del título y Fisichella sigue sin estar a la altura (foto Renault)

Montoya perdió un segundo puesto clave para McLaren-Mercedes (foto Daimler-Chrysler)

Entrenamientos: McLaren contra Renault, los demás no cuentan

La primera sesión de calificación en el nuevo circuito otomano dejó claro quienes eran los que iban a luchar por la victoria. La pole de Raikkonen no sorprendió a nadie, mientras que el segundo y tercer puesto de los Renault, con Fisichella por delante de Alonso, y batiendo ambos a Montoya, volvía a demostrar que sólo los coches fabricados en Enstone pueden seguir el ritmo de los McLaren en estos momentos. Eso si, el hecho de que, saliendo a mitad de sesión en una pista muy sucia, los dos R25 se hubiesen situado tan arriba dejaba sus buenas dudas en el aire ¿Estarían los Renault muy "descargados" de gasolina o habían recuperado el ritmo ganador perdido en Hungria? La carrera se encargaría de demostrar que era más lo primero que lo segundo pero, de entrada, para Alonso lo importante era estar "ahí arriba" en la parrilla, lo más cerca posible de Kimi y metiendo presión desde el principio.

Kimi inalcanzable

La espectacular salida de los Renault casi respondía ya a todas las incógnitas respecto al peso de los coches franceses. Si el equipo que debe de correr a la defensiva, dada su ventaja de puntos, salía tan al ataque, parecía claro que su estrategía era la de parar cuanto antes y necesitaban "pista libre" desde el primer momento. Fisichella pasaba el primero por el tobogan "estilo Brasil" de final de recta, y poco faltaba para que Alonso le siguiese, precediendo también a Raikkonen. Pero el finés resistía el asalto del asturiano y, poco después, aprovechaba un error del romano para recuperar la primera plaza y echar por tierra el "plan A" de Renault. Paso entocnes al "plan B"; la comunicación via radio entre el box y Alonso era clara "eres más rápido que 'Fisco', ¡adelántale!". Dicho y hecho, en plena recta de atras Alonso pasaba a Fisichella como si este fuese un doblado. Las ordenes de equipo están prohibidas pero las "sugerencias" se admiten y la resistencia a ser superado por parte del italiano hubiese estado fuera de lugar. Porque, además, Fernando era claramernte más rápido como enseguida se encargó de demostrar a base de ser el único capaz de seguir el ritmo de Raikkonen. Los dos se escapaban a base de vueltas rápidas, dejando a sus "subalternos" en pelea por la tercera plaza pero sin poder inquietarles, al menos de momento.

Pero cuando Alonso entró a repostar mucho más pronto de lo que en McLaren habían preveido para Raikkonen, las cartas de unos y otros quedaron ya definitivamente al descubierto. Si con mucho menos combustible en su depósito, el R25 no había podido con el MP4/20 la conclusión estaba clara ¡no había nada que hacer!

Button fue el único que rodó al ritmo de los de cabeza (foto BAR F1)

Fin de semana para olvidar el de Schumacher y Ferrari en Estambul (foto Bridgestone)

Día negro también para los Williams mientras que los dos ReBull volvieron a punutar (foto BMW press)

Dos puntos más que saben a gloria

Una vez abandonada toda aspiración a la victoria, para Alonso y Renault quedaba el intentar hacerse al menos con la segunda plaza, aunque la tercera también era una "perdida admisible" dentro de las opciones matemáticas que la ventaja de Fernando en el campeonato permitía.
En McLaren el objetivo era, lógicamente, el contrario. Así que cuando Montoya paró para su primer repostaje, las prisas por volver a pista cuanto antes y situarse ya delante de Alonso casi le cuestan al equipo inglés un disgusto. Juan Pablo por poco se lleva "enganchado" al encargado de la manguera de combustible aunque, finalmente, nada pasó, a parte del susto y las décimas de segundo perdidas en la confusión del momento. En todo caso, el McLaren se incorporaba a la carrera justo donde su equipo quería, segundo tras Kimi y delante de Fernando.

El resto de la carrera sería un duelo a distancia Montoya-Alonso con el asturiano haciendo gala de una de sus mejores virtudes, esa increible capacidad para rodar siempre al límite de lo que su monoplaza puede ofrecer que tantos puntos le está dando este año y que, de acabar siendo campeón, será una de las claves en la obtención del título. Porque igual otro en su lugar se hubiese conformado ya con una tercera plaza que valía de sobra para seguir dependiendo de si mismo aunque Kimi siga ganando. Pero de haberse conformado, Fernando tendría ahora dos puntos menos, dos puntos que a final de año pueden valer su peso en oro.
El caso es que el Renault siguió teniendo a la vista al segundo McLaren y Montoya, consciente de la importancia que para su equipo tenía acabar segundo, terminó por ser víctima de otro de esos extraños incidentes que parece que sólo le pasan a él y que nos trajo a la memoría auquel fatal doblaje a Verstappen en un GP de Brasil de hace unos años cuando iba camino de su primera victoria, delante del mismísimo Schumacher. Esta vez era Monteiro el que le sacaba de la pista al fallar una frenada, tal vez sorprendido por el brusco doblaje que le acababa de realizar el colombiano, con prisas por meter un coche de por medio entre su McLaren y el Renault de Alonso. Aunque Montoya volvía a la pista con rapidez, de golpe la diferencia con Alonso se había quedado en nada y, lo que era peor, el difusor trasero de su McLaren estaba lo suficientemente tocado como para que, la siguiente vez que los dos pasaban por la exigente y originalísima curva 8, el McLaren no pudiese mantener la trayectoria, alargase el viraje recorriendo varios metros fuera de la pista y viese impotente como Alonso pasaba y sumaba dos inesperados puntos más que le hacían, sin duda, el hombre más feliz de los tres que subían al podio, pese a no ser el ganador de la carrera.

Del resto sólo los BAR

Por detrás de los tres ocupantes del podio y máximos protagonistas de la carrera también hubo mucho movimiento. Empezando por la increible serie de reventones de las ruedas traseras de los Williams, dos por cabeza para Heidfeld y Webber que se llevaron sus buenos sustos justo cuando sus coches se habían mostrado algo más rápidos en entrenos. La desgracia de Webber se completó con su toque al Ferrari de un Schumacher en fin de semana negro ya desde su salida de pista en entrenos. El alemán no facilita el adelantamiento ni cuando viene por detrás alguien con vuelta perdida y el resultado fue que ambos, "desdoblador y desdoblado" acabaron fuera de carrera.
Mejor les fueron las cosas a los BAR, otros que también la "habían fastidiado" en entrenos. De hecho, el ritmo de Button fue el mejor de los "no McLaren y Renault" por lo que de haber tenido en una buena posición de salida quien sabe si se podría haber mezclado en la lucha por un puesto en el podio. La insultante facilidad con la que pasó a Alonso, bien es verdad que cuando este iba bastante más cargado, deja en el aire la incógnita sobre las posibilidades del inglés que, ¿quien sabe? podría ser un peligroso escollo para el español en las carreras que restan, convirtiéndose en un "tercer McLaren" en lo que a restar puntos al español respecta.

Empieza la cuenta atrás final

Tras el estreno de Turquía como sede de la fórmula 1, ya sólo quedan cinco carreras, la primera en todo un clásico, el autódromo de Monza. Con venticuatro puntos de ventaja y cincuenta por disputarse la ventaja es cada vez mayor para Alonso pese a que Raikkonen sigue ganando. En McLaren han demostrado que son perfectamente capaces de ganar las cinco carreras que quedan, es más, no me extrañaría que lo hiciesen. Pero ni siquiera eso les basta, incluso con cinco dobletes Raikkonen-Montoya, el campeonato será para Alonso si continúa con su línea de regularidad y acoso permanente a las felchas plateadas. El título todavía no lo ha ganado el asturiano pero sigue dependiendo de si mismo y no es de los que dejen escapar oportunidades como esta.