La
afición al automovilismo de Rubén viene, como
la de tantos otros, por tradición familiar, ya que
su padre, José Abel García,
fue asiduo participante en pruebas de montaña a los
mandos de un Alpine y un SIMCA Rallye.
Rubén da sus primeros pasos en competición en
el karting, modalidad en la que participa durante las temporadas
85 y 86.
Su paso a los coches se produce en la temporada 94 tras adquirir
un Peugeot 205 Rallye con el que, encuadrado
dentro de la Copa Junior, obtiene ya resultados
de relieve de entre los que destacan un 2º lugar en Muncó
y un 3º en el Rallye de Llanes.
Al 205 le sigue un más competitivo Citroen
AX GTi con el que se proclama subcampeón
de Asturias de Rallyes en 1997 pese a la modestia
de los medios a su disposición.
Para la temporada 1999 pasa a competir con un AX de Grupo
A con el que obtiene el primer puesto de
su Clase en el Campeonato del 2000.
El salto a un vehículo más potente se produce
en el 2002 con la adquisición de un Seat Ibiza
Junior Grupo A de Seat Sport con el que termina 2º
en el rallye de Segovia y 3º en el Rallye de Luarca,
demostrando en ambos casos su habilidad para rodar rápido
cuando las condiciones son más difíciles al
tratarse de dos rallyes marcados por la insistente lluvia.
Para el 2003, ya más hecho al coche, Rubén va
a ser uno de los seguros protagonistas de nuestro regional
de Rallyes.
|